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9, septiembre 2016 - 9:23

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Frente a frente, Cruz Azul y América engloban una rivalidad que va más allá de las estadísticas. Se trata de los equipos con mayor participación en Liguillas –a pesar de que La Máquina no ha clasificado en los últimos cuatro torneos–. Las Águilas, con 51 fiestas disputadas, y los Cementeros con 50, son de los clubes que más finales han celebrado. Tantas que han coincidido en tres de ellas.

Los americanistas, presentes en 15 finalísimas –desde que se implantaron las Liguillas–, han ganado 11 (su otro título, más los otros cuatro subcampeonatos, corresponden a otro formato). Los cruzazulinos también han sostenido 15 finales, pero sólo han conquistado seis. Esas nueve derrotas, en la disputa del campeonato, lo han transformado en el indiscutible “subcampeonísimo”, que tanto satanizan sus detractores.

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América y Cruz Azul jugaron su primera gran final en la temporada 1971-72. En un solo encuentro, en el estadio Azteca, los albiazules golearon 4-1 y fincaron, a partir de entonces, el llamado Clásico Joven. Miguel Marín, en la portería, y otros figurones como Cesáreo Victorino, Fernando Bustos, Octavio Muciño, hicieron brillar a aquella sorprendente Máquina. Enrique Borja marcaría el del honor crema.

La revancha azulcrema llegó en la inolvidable década de los 80. La batalla resultó espectacular, en la campaña 1988-89. Adrián Chávez y sus grandes lances, el “Che-ché” Juan Hernández, por el carril derecho, y Alfredo Tena, en la central; Cristóbal Ortega, como recuperador; el talento de Antonio Carlos Santos; la velocidad de “Zaguinho” y el gol de Carlos Hermosillo, como principal verdugo del Cruz Azul –del que después sería referente–, acabaron con aquellos celestes, comandados por el “Pato” Hernández.

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La tercera edición llegó en el Clausura 2013. Con La Máquina a punto de coronarse en el Coloso de Santa Úrsula, sobrevino el dramático cierre de las Águilas. Ese agónico cabezazo del portero azulcrema, Moisés Muñoz, desviado por Alejandro Castro, hizo posible el empate, y la coronación en penaltis, con el colérico Miguel Herrera en el timón milloneta.

Historia pura de un encuentro que siempre tendrá mucho qué contar. Épicas batallas… inolvidables contiendas, y una rivalidad que ha crecido en tres ediciones por el trofeo de Liga. Sólo el duelo entre América y Pumas también ha podido efectuarse tres veces, en la lucha por el campeonato.

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En esta ocasión se trata de una contienda de temporada regular. La última vez que se vieron las caras, el marcador registró un emotivo 3-3 en el Azteca, apenas la temporada pasada. Antes de eso, un rotundo 0-2 amarillo en el Azul (Apertura 2015), y previo a ello, el 1-0 Águila en Santa Úrsula, en el Clausura 2015. La última victoria celeste data del Apertura 2014. Contundente 4-0. Pero la gran final entre ambos, en 2013, aún sigue en la memoria. Imposible evitarlo.