NUEVA YORK (AP) — El incidente de violencia doméstica de Ray Rice, que le ha generado un enorme problema de imagen a la NFL, produjo también una ruptura entre CBS y Rihanna.

La cadena televisiva dijo el martes que dejaría de difundir una canción que incluye la voz de Rihanna en sus emisiones de los partidos de la NFL los jueves por la noche, luego que la cantante escribió un tuit profano al respecto.

Una porción de “Run This Town”, de Jay-Z con Rihanna, fue cortada durante la transmisión del partido del jueves pasado entre los Ravens de Baltimore y los Steelers de Pittsburgh porque CBS estaba cubriendo la controversia por el ataque del running back de los Ravens a su entonces prometida.

CBS planeaba usar la canción el jueves y por el resto de la temporada, pero Rihanna tuiteó: “CBS sacaste mi canción la semana pasada, ¿ahora quieres meterla de nuevo este jueves? … Qué triste que me penalicen a mí por esto”. Agregó un improperio.

Tras el mensaje de Rihanna, CBS emitió un comunicado diciendo que estaba “yendo en una dirección diferente” con música diferente.

La canción era una de un puñado de elementos que CBS cortó de su transmisión inaugural de fútbol americano el jueves.

El presidente de CBS Sports Sean McManus dijo que la propia historia de Rihanna como víctima de violencia doméstica fue parte de la decisión pero no la predominante. La canción iba a escucharse durante las seis transmisiones de los juegos los jueves por la noche por CBS, y en ocho más en la cadena de la NFL.

Roc Nation Company, la empresa de Jay-Z que representa a Rihanna, indicó que tomó la decisión de no permitir el uso de la canción. Roc Nation añadió que CBS confundió al público al anunciar el uso de la canción para sus emisiones, al dar la impresión que Rihanna grabó música específicamente para el poryecto. La compañía también señaló que nunca vio o aprobó el comunicado divulado por CBS.

Una vocera de Rihanna se abstuvo de hacer comentarios sobre la decisión de CBS, que representa una pérdida importante de publicidad para la artista: más de 10 millones de personas vieron el primer partido el pasado jueves, según la compañía Nielsen.