POR OMAR PÉREZ DÍAZ/ SOL DE HIDALGO/ @OMARPDIAZ

FOTOS: JOSÉ LUIS GARCÍA/ ENVIADO ESPECIAL/@_PEPELUIS68

PACHUCA.- El superlíder ha salido sin rasguño del Estadio Hidalgo.

En el último minuto, Tijuana encontró el gol que le permitió empatar 2-2 con Pachuca, este sábado, ante una buena entrada en el Estadio Hidalgo.

Dos veces los Tuzos estuvieron adelante, con tantos de Víctor Guzmán e Hirving Lozano pero los escurridizos Xolos alcanzaron en el mismo número de ocasiones, con polémico penal ejecutado por Dayro Moreno y un agónico remate de Milton Caraglio.

Llegan los fronterizos a 18 puntos y los hidalguenses se quedan en 14.

Buen juego, con los eternos contrastes: bien para el visitante y mal para el anfitrión, en animado choque.

DE TÚ A TÚ

¿Cuántas veces ha escuchado decir que “la mejor defensa es el ataque”?

Pues bien, para comprender en toda su dimensión este viejo adagio podrían observar el primer tiempo de Tijuana.

El equipo del “Piojo” Herrera no empezó bien el partido. Se le notó desordenado, incomodo, en los primeros minutos, y eso lo aprovechó Pachuca con su velocidad para crearle problemas.

Se acercaron Lozano y Jara en ese amanecer del partido, dando la impresión que los Tuzos se llevarían entre las patas al líder.

El gol de Víctor Guzmán, en un fantástico contragolpe de Urretaviscaya, el campeón se puso adelante 1-0 al minuto 21.

Xolos, sin embargo, ajustó. Empezó a adelantar metros, a presionar adelante, comiendo metros y provocando errores del local. Atacando, con lo mejor que tiene, el cuadro de la frontera enderezó el juego y acabó siendo mejor.

Porque Avilés es rápido, porque Dayro es un demonio, Hauche una lata constante y Caraglio un depredador. Así, empujando, apretando, se encontraron con una mala apreciación arbitral y empataron por la vía del penal, cobrado por Dayro Moreno al 29.

Tijuana acabó mejor armado, sólido en la cancha, por esa inusual propuesta de ir adelante como visitante y estar más tiempo en campo ajeno.

Pudo hasta terminar en ventaja pero un zapatazo de Hurtado dio en el poste ante la imposibilidad tuza de tener la pelota y meterla en su ritmo.

Faltaba la repuesta del campeón.

En el segundo tiempo, los Tuzos salieron con la misa intensidad.

Si el primer lapso había sido caliente y luchado, en el complemento la lucha se disparó porque el anfitrión salió con la idea de hacer respetar su casa, donde no pierde desde hace 10 meses.

Un descuido de Tijuana permitió a Hirving Lozano hacer el 2-1 con otro derechazo de antología, llevando el partidos otros terrenos.

Ahora fue Pachuca quien tomó el mando. Diego Alonso leyó el juego de manera perfecta y pidió a sus muchachos cuidar la pelota, bajar las revoluciones y se más cerebrales.

La calidad hidalguense se fue haciendo sentir. Pesando sobre la balanza hasta desacomodar a los canes, que ya no tuvieron gas para apretar de la misma manera.

Echando las amígdalas por delante, con el “Burrito” Hernández poniendo el ejemplo, los Tuzos maniataron a los visitantes, le dejaron menos tiempo el esférico, reduciendo oportunidades.

Así se fue el tiempo, al grado de mantener la ventaja en el marcador, aunque le quedó una última bala en el cargador al “Piojo” Herrera, fue a balón parado y ahí empataron con un disparo perdido en el aire.

Gol de los Xolos y ya no hubo nada más. Un puntito para cada lado y chao