La boxeadora mexiquense Yéssica Chávez cumplió con el prepesaje de siete días y está lista para exponer el título mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ante la japonesa Naoko Fujioka, quien hizo lo propio.

A una semana de verse las caras en el Centro Regional del Deporte de Las Américas, las boxeadoras debieron cumplir con el requisito de subir a la báscula, con el objetivo de prevenir la deshidratación excesiva y posibles efectos secundarios.

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La “Kika”, quien el próximo 1 de octubre realizará la cuarta exposición del cetro mundial, acudió al Gimnasio Romanza, donde trabaja de manera habitual, y marcó 52.300 kilos, dentro del límite permitido, que es hasta cinco por ciento más del peso de la división correspondiente, en este caso 50.800 kg.

“Estoy en gran momento, trabajo todos los días para ser la mejor del mundo y para complacer a mi público; estoy muy motivada de regresar a mi Ecatepec querido, ante una rival que me exigirá al máximo y que pondrá todo de su parte para que mi gente vea una gran pelea”, apuntó.

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Fujioka, quien aún está en su país, donde ultima detalles para su viaje a México, registró peso de 52.700 kilos, debajo de lo permitido, que era 53.340, por lo que está apta para el combate, donde buscará su tercer cetro mundial en diferente categoría.

Chávez Valencia, entrenada por Ignacio Beristain, ya defendió el cetro ante la italiana Simona Galassi, la argentina Vanesa Taborda y la mexicana Esmeralda Moreno, segura de que volverá a hacerlo, “este título se queda aquí, así me cueste la vida”.