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8, octubre 2016 - 20:42

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BOSTON.- Si eres partidario de los Medias Rojas de Boston, hay varias maneras de ver la situación del equipo. Abajo 0-2 en la Serie Divisional de la Liga Americana ante los Indios de Cleveland y a una derrota de quedar eliminados de los playoffs, los Patirrojos podrían recurrir a datos históricos para animarse.

En dos ocasiones, el equipo ha remontado dicha ventaja en la época de la “Serie Divisional” (desde 1995), siendo la última vez en el 2003 contra los Atléticos, precisamente el primer año del dominicano David Ortiz con los Medias Rojas. Y en 1999, los bostonianos lo lograron justamente ante la tribu, serie que culminó con la espectacular actuación del dominicano y ahora Salón de la Fama Pedro Martínez, quien viniendo de una lesión, tiró los últimos seis innings sin hit ni carrera del decisivo Juego 5 en Cleveland para sellar la victoria.

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Pero del otro lado de la moneda, en otras tres ocasiones los Medias Rojas se han encontrado en esta misma situación de 0-2 y han sido barridos. Una de ellas fue en 1995, cuando la misma novena de Cleveland fue el victimario.

Ahora bien, los mismos jugadores de Boston saben que en realidad, la clave es mucho más sencilla: jugar un mejor beisbol a partir de este día en el Juego 3 de la serie en el Fenway Park.

“Tenemos que batear y pitchar mejor”, dijo Ortiz, quien enfrentará la posibilidad de que esta tarde sea su último día como jugador activo de Grandes Ligas. “No hemos jugado bien. No tenemos otra opción que jugar mejor ahora en casa”.

“Estamos contra la pared. Está bastante claro lo que nos espera”, dijo su mánager, John Farrell. “Contaremos con Buchholz en el montículo con la actitud de que no hay mañana”.

Boston tuvo marca de 47-34 como local durante la temporada regular. Ahora el equipo espera que la magia del Fenway y sus fanáticos le brinden la inspiración necesaria para reaccionar.

Buchholz (8-10), tendrá como rival al derecho Josh Tomlin (13-9).

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ANTE SU PÚBLICO

TORONTO.- Se suponía que Aarón Sánchez estaría en el bullpen de los Azulejos en este momento del año. En su lugar, el derecho será el abridor esta noche contra los Rangers de Texas, en busca de llevar a Toronto a la serie de campeonato de la Liga Americana.

Sánchez cumplió una salida contra los Rangers este año, y no fue de las mejores. Toleró seis carreras, igualando su mayor cantidad de la campaña, y siete hits en seis innings y dos tercios en la derrota 7-6 el 15 de mayo. Ese fue el día de la gresca protagonizada por el infielder de los Rangers Rougned Odor y el toletero de los Azulejos José Bautista, incidente que se produjo luego que Sánchez ya había salido del partido.

Con Texas al borde de la eliminación tras perder los primeros dos juegos en casa, Sánchez representa un mayor reto. El torpedero de los Rangers Elvis Andrus dijo que la clave será la agresividad en el plato.

“Es un pitcher de rectas y sabemos que saldrá a imponer su autoridad desde el inicio”, dijo Andrus. “No hay que permitirle que se sienta cómodo”.

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El derecho Colby Lewis, con marca de 4-1 y efectividad de 2.38 en nueve aperturas de postemporada, abrirá por los Rangers.

Texas no ha sido barrido en los playoffs desde derrotas seguidas en series divisionales ante los Yanquis de Nueva York en 1998 y 1999. Remontándose a 2015, los Rangers han perdido cinco juegos seguidos de postemporada contra Toronto.

“Este equipo no ha caído presa del pánico”, advirtió el manager de los Rangers Jeff Banister.

Azulejos no podrá contar con su lanzador zurdo Francisco Liriano, quien sufrió una conmoción cerebral al ser golpeado en la cabeza por una línea bateada por Carlos Gómez en el segundo partido.

Según el kinesiólogo George Poulis, el zurdo dominicano se encuentra en buen estado tras someterse a pruebas. Pero no se ha determinado si podrá volver a tirar.

Los peloteros que sufren conmociones deben recibir el visto bueno de las Grandes Ligas antes que se les permita volver a la acción.