POR ALEJANDRO ALFARO

FOTOS: ÓSCAR RAMÍEREZ

En medio de todo lo que hasta ahora ha sido el festejo por el Centenario de América, un refuerzo muy especial fue presentado la mañana de este martes en Coapa. Un elemento que le ha inyectado nuevos bríos y ánimos al conjunto azulcrema de cara al cierre del torneo, finales de Copa MX y Mundial de Clubes.

No fue una bomba europea, ni nada por el estilo. Se trató de un pequeño niño de seis años de edad llamado César Augusto Villafuente, quien ante los medios de comunicación posó junto al banner con su nombre y el escudo de los 100 años de las Águilas a sus espaldas para dar formalidad al acto.

En conferencia de prensa, César se dijo comprometido y con deseos de esforzarse para que América pueda ganar, además de añadir su experiencia en el club al ser presentado ante sus nuevos compañeros.

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Esta historia podría parecer extraña. Sin embargo, no lo fue para César, niño perteneciente a la fundación “Doctor Sonrisas”, que cumplió su sueño de formar parte de su equipo favorito en un acto lo más cercano a la presentación oficial de un nuevo jugador.

Y es que el alcance que tiene el futbol va más allá de lo imaginado. Para muestra, basta lo explicado por el padre de César, quien relató el bien que le hace a su hijo para olvidar un poco lo difícil que puede ser para él combatir el tratamiento que lleva contra la leucemia.

“Es muy emotivo para uno. En un partido, acababa de tomar su quimioterapia, y lo reanimó. Iba perdiendo América 3-0 y después empezaron a caer los goles, y empezó a gritar. Al final, la vuelta 4-3 y un ánimo enorme para mi niño, la verdad”, comentó su papá.

El resto de la semana, César convivirá con sus ídolos y estará presente en el partido contra Tijuana del próximo sábado, como uno más de la plantilla. Sin lugar a dudas, el regalo más especial por el centenario de su equipo favorito.