Miguel Bosé, al presentar el miércoles su álbum desenchufado MTV Unplugged, a casi 40 años de trayectoria, reconoció que de sus más de 70 hits, ‘“Te amaré’ es la canción más bella que jamás he hecho”, y que al igual que las restantes 15 que las re-versionó, “las hice en acústico con un gran sacrificio, para adentrarme en un mundo lejano, desconocido e inhóspito, porque yo en todos estos años he creado mis temas con ordenadores, computadoras que me han dado mi identidad en cuanto a un sonido único”.

Ataviado en prendas negras, que ya es su costumbre, modelando, con un buen sentido del humor como refiriéndose que si el estar bien, comer sano, ponerse cremas, lo lleva a ser vanidoso, lo ratificó con: “¡Sí lo soy!”, e igualmente habló de Europa como un “mal” continente para los exiliados, y también tocó la contienda Hillary Clinton versus Donald Trump en busca de la presidencia de Estados Unidos.

“Denunciar una vez más que Europa está tratando a los exiliados de guerra con una dureza extrema. Y repito: Europa es una vieja señora, muy rica, muy adinerada, que ya es hora que compartamos sus joyas. Si eso nos pasara mañana, quisiéramos que alguien nos abriese sus puertas para reconstruir tu vida, para construir el futuro de tus hijos”.

Una vez más, Bosé dijo que no piensa retirarse de los escenarios, porque tiene cuatro hijos, que gracias a ellos se conversa más creativo, vital y lleno de ejercicios de la paternidad en su vida diaria, “este es mi secreto”, y reiteró que en cada álbum, “le impregno el respeto a lo que hago y sí, todo lo hago con los nervios de siempre, porque cuando desaparezcan, tendré que preocuparme. Y les prometo que yo seguiré aquí asediándoles, porque todavía tengo la gira del acústico y otras 30 ideas musicales más…”.

No quiso pasar por alto que en España surgen talentos y ahora, después de Alejandro Sanz, “surge Pablo Alborán como una especie musical que se da cada 15 años, “con voz, con una propuesta diferente, fresca y con ángel. Desde Alejandro Sanz no se había dado otro talento así tan completo”.

El cantautor español adentrándose a las lides políticas, confió que este fin de semana –sábado 15, en San Diego, Estados Unidos-, estará conminando a los latinos a ejercer su derecho al voto y elegir al candidato, “el menos peor”.

“Estados Unidos es un país de migrantes, de exilio, es un país con una mezcla mundial de todas las nacionalidades. Estados Unidos es gracias a todos una nación poderosa, y por eso tienen que votar, por sus principios, valores, identidad que son los que han construido a Estados Unidos”.

Afirmó que Hillary Clinton es la mejor opción para gobernar Estados Unidos, porque ella le va a dar continuidad a los convenios, aunado a que cuando él y Juanes fueron a dar el mega-concierto en Cuba, “ella nos dio todas las facilidades y fue parte para que mi pasaporte no tuviera la ‘X’ por haber estado en la isla caribeña”.

Y ahondó: “Me encantaría ver a una mujer presidenta de Estados Unidos. En Europa tenemos muchas, en el mundo hay muchas, pero me gustaría verlo en un país que es la economía más fuerte del mundo”.

De su amor por México y por conservar las tradiciones y apoyar a las distintas etnias nacionales, es porque “este país ha estado conmigo ‘en las buenas, en las malas y en las muy muy malas’. Y mi filantropía es regresar algo de lo mucho que me han dado todos estos años, apoyando a los indígenas en la ordenación de su vida como en la educación y muy pronto seguiré en Chihuahua, en la zona tarahumara”.

Así, Miguel Bosé se dio el gusto en este álbum desenchufado a ritmo de bachata, cumbia y balada, de cantar al alimón con Sasha Sokol, “Como un lobo”; Pablo Alborán, “No hay ningún corazón que valga la pena”; Ximena Sariñana, “La chula”; Benny Ibarra, “Sólo sí”; Fonseca, “Bambú”, y Juanes, “Amiga”.