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22, octubre 2016 - 19:40

┃ Tonatiuh Guerra

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Si usted pensó que Cruz Azul tenía etapas malas, está es la peor en los últimos años.

En torneos anteriores, La Máquina por lo menos calificaba y llegaba a finales que perdía increíblemente, pero anoche lo que sucedió en la cancha del estadio Azul fue realmente triste y decepcionante.

El equipo de La Noria cayó ante Puebla 1-2, por lo que está prácticamente eliminado y sin aspiraciones a liguilla, ya que el descalabro los hunde en la tabla general con 16 unidades en el décimo tercer puesto. El público celeste ya ni llora esta derrota pues parecen estar acostumbrados a que Cruz Azul no logre cosas grandes, pues suma dos años y medio sin clasificar a la Fiesta Grande.

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Las anotaciones con las que La Franja se mete a pelear por un puesto en liguilla fueron obra Damián Escudero y Álvaro Navarro,; mientras el gol de la honra para los celestes fue por conducto de Aldo Leo

Es cierto que el arbitraje perjudicó a los celestes, quienes parece que no les dolió la eliminación de la Copa MX.

Con este resultado el futuro de Tomás Boy está más que escrito pues no continuará al frente de La Máquina.

El cierre de los celestes será ante Chivas, Pachuca y León, donde buscarán cerrar dignamente antes de que comience la catástrofe pues todo indica que el próximo torneo estará completamente inmiscuido en problemas de descenso junto con Morelia, Chiapas y Veracruz.

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 ¡ACUCHILLADOS!

El arbitraje nuevamente da de qué hablar.

Cruz Azul se vio afectado por Eduardo Galván (árbitro central) e Israel Valenciano (asistente uno), pues le anularon un gol legítimo.

Incrédulo y con las manos en la cabeza, Joffre Guerrón reclamó con fuerza, pues tras el remate del “Cata” Domínguez, el ecuatoriano, quien apareció sin marca mandó el esférico al fondo del marco, situación por la cual el abanderado marcó un fuera de lugar, que no existió, ya que delante de Guerrón estaba el cancerbero y un zaguero, por lo que el sudamericano estaba habilitado, motivo por el cual en los vagones de La Máquina el coraje fue inmenso.

La marcación del cuerpo arbitral solo encendió más el duelo que estaba caliente, pues ambos equipos tuvieron opciones para abrir el marcador.

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Los celestes estrellaron dos balones a la base del poste derecho, uno del “Conejo” Benítez y uno del propio Guerrón. Por su parte La Franja no pudo concretar gracias a los estupendos reflejos de Chuy Corona, quien se tendió en el fondo para sacar de la línea un remate de volea de Damián Escudero, quien marcaría un golazo.

Con el afán de mantenerse con vida en la Liga, los cementeros se volcaron al frente, situación que aprovechó el equipo de Ricardo Valiño para contragolpear, estrategia que le surtió efecto. En un contraataque Pedro Canelo fue detenido en los linderos del área por Velázquez con una falta artera, por lo que el colegiado no dudó en marcar la falta. Escudero cobró perfecto y envió la pelota al fondo de la puerta de Corona, para así silenciar el coloso de la Colonia Noche Buena.

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El tanto de los camoteros caló hondo en el seno celeste por lo que se fueron al frente como fiera herida para emparejar el encuentro. Con pelota dominada, Cruz Azul llegó una y otra vez, pero la mira de sus delanteros no estaba fina, así que sis disparos culminaron en las tribunas.

El primer lapso estaba por culminar cuando la esperanza revivió en La Máquina.

Aldo Leao se encontró un balón suelto y mandó un disparo pegado al poste, imposible para Campestrini, para de esa forma hacer vibrar si casa con el estruendoso grito de ¡goool! e irse al descanso con una ligera sonrisa.

MATARÓ O MORIR

Para el complemento, La Máquina metió la “cuarta” para obtener el triunfo, por lo que sin medir consecuencias se volcó al frente dejando espacios para que Puebla pudiera contragolpearlos, haciendo la tónica del encuentro en un vaivén de emociones, en la que el público asistente estuvo al borde de sus butacas y mordiéndose las uñas, pues ambos cancerberos tuvieron que emplearse a fondo para salvaguardar su meta y mantener el empate.

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De pronto, el “Conejo” Benítez se encontró con un yerro de la defensa poblana y se enfiló solo frente a la portería para encarar a Campestrini, pero un jalón de Robert Herrera evitó la catástrofe, y ante la clara falta que el colegiado dejo continuar no fue amonestado el defensor, por lo que el plantel completo de La Máquina reclamó por la polémica que nuevamente se vieron involucrados.

La mala marcación del cuerpo arbitral no hizo desistir a los celestes, quienes en los minutos finales tomaron por completo las riendas del encuentro, disparando una y otra vez contra la portería del guardamenta poblano, quien ante la bruma celeste no tuvo mucho que hacer, debido a la solidez de si defensa, que se encargó de cerrarle todos los espacios a los delanteros cruzazulinos.

La desesperación inundó a los jugadores de Tomás Boy, quien desde los palcos no paraba de hacer corajes, y cuando parecía que las cosas no le saldrían tan mal, La Franja le puso final a todas las aspiraciones de liguilla a Cruz Azul. Álvaro Navarro, quien entró de cambio y está acostumbrado a darle la vuelta a los marcadores venció a Chuy con un certero cabezazo y de esa forma desatar los abucheos del respetable, quien salió con un enorme dolor por dos derrotas consecutivas.

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