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26, octubre 2016 - 10:14

┃ AP

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Más de seis meses después de romperse dos ligamentos de una rodilla en el tercer partido de la temporada, Kyle Schwarber regresó anoche a la alineación de los Cachorros de Chicago. Y nada menos que para el primer partido de Serie Mundial del equipo en 71 años.

Schwarber, un toletero de 23 años que jugó su último partido en las mayores el 7 de abril, apareció como bateador designado y quinto en la alineación para el primer duelo de la Serie Mundial entre los Cachorros y los Indios de Cleveland anoche.

“Me siento muy bien, tengo confianza plena, y confío en mi capacidad para correr”, dijo Schwarber en conferencia de prensa.

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Apenas había comenzado la temporada cuando Schwarber, se estrelló en una jugada en Phoenix, Arizona, con el jardinero central de Dexter Fowler, en lo que inicialmente se diagnosticó como una distensión en el tobillo izquierdo.

Posteriormente, se determinó que había sufrido desgarres significativos de dos ligamentos principales, el central y el lateral, de su rodilla izquierda, aparte de una fuerte torcedura de su tobillo y que se quedaría fuera por el resto de la temporada del 2016.

El único que llegó a predecir, a lo largo de todo este camino, que Schwarber se recuperaría a tiempo para jugar en el Clásico de Octubre fue el relevista dominicano Pedro Strop, que siempre le animaba al respecto.

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“Hace seis días”, respondió de manera contundente Schwarber, cuando se le preguntó cuándo comenzó a pensar de manera realista que sí tenía oportunidad alguna de jugar en la finalísima beisbolera frente a los Indios de Cleveland. “Todo el tiempo, el plan era que estaría listo para los Entrenamientos de Primavera”.

Schwarber tenía previsto perderse toda la temporada de 2016 tras lastimarse en un choque en el jardín izquierdo y ser operado por la rotura de dos ligamentos de la rodilla izquierda, pero el 17 de octubre recibió el visto bueno médico para volver a jugar.

Desde ese momento, Schwarber comenzó a practicar más con aspectos como correr, moverse de un lado para otro, irse a Arizona para ver unos 1,300 lanzamientos disparados por una máquina y jugar en un par de partidos de la Liga Otoñal. Ahí se fue de 6-1 con un doble y dos boletos, antes de volar a Cleveland.

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“Cuando recibí la noticia de que no tenía restricciones (en la rehabilitación), le dije a Theo (Epstein, el jefe deportivo del equipo) que quería tener la oportunidad de intentarlo”, relató. “No lo hice por llamar la atención de los medios. Lo hice por mis compañeros y lo hice por mí”.

Chicago dejó fuera del grupo al relevista zurdo Rob Zastryzny para abrir un hueco para Schwarber en el roster de 25 jugadores.

En su temporada de novato en 2015, Schwarber bateó .246 con 16 jonrones y 43 remolcadas en 71 partidos.

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Tan bien se ha recuperado Schwarber, que Maddon no ha descartado al ciento por ciento la posibilidad de usarlo en los jardines en los Juegos 3, 4 y 5 a celebrarse en el Wrigley Field.

“No lo sé, no lo hemos planeado”, admitió Maddon. “Pero veremos lo que pasa (en Cleveland) También será realmente importante su recuperación. ¿Cómo se va sentir al día siguiente?”

Cleveland también realizó un cambio a su roster, al incluir al pitcher Danny Salazar en lugar de Cody Anderson.

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