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3, noviembre 2016 - 14:51

┃ EFE

Nota-Fut-aduriz

Otra noche mágica de Aritz Aduriz, que marcó los cinco goles de su equipo en el 5-3 final, dio vida al Athletic Club en San Mamés ante un ofensivo, osado e irreductible KRC Genk belga y, de paso, le rescató en una Liga Europa de la que hubiese quedado casi eliminado de no ganar este jueves.

De los cinco tantos de Aduriz, tres fueron de penalti, transformando claras faltas máximas sobre Iker Muniain, Raúl García e Iñaki Williams, el primero con un toque sutil con la derecha y el cuarto definiendo ante el holandés Marco Bizot con la izquierda después de un gran pase desde campo propio entre línea del joven Yeray Álvarez.

Aunque a punto estuvieron de no valer tantos goles del ariete internacional, ya que el Genk también hizo un espléndido partido y fue apurando al Athletic con los goles del jamaicano Leon Bayley (2-1), el nigeriano Wilfred Ndidi (3-2) y Tino-Sven Susic (4-3).

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Líder, por mejor diferencial de goles, es el Genk y segundo un Athletic que solventó la que ha sido su primera final de la temporada. Lo hizo, como no, de la mano de su mejor jugador, Aritz Aduriz, que completó una noche para la historia.

La pólvora la tenía el Athletic y en su primera llegada los de Valverde abrieron el marcador. Lo hizo Aduriz tras una gran contra montada por él mismo abriendo a Balenziaga, que centró sobre Raúl García para que el navarro dejase de cabeza a la llegado del ariete, que batió a Bizot con un toque sutil.

No se arredró el conjunto belga, que siguió percutiendo una y otra vez la banda derecha a través del rapidísimo jamaicano Bailey, pero el que volvió a dar fue el Athletic. Castagne hizo un claro penalti al incisivo Muniain y Aduriz, muy sólido desde los once metros, puso el 2-0.

Parecía caminar el partido hacia una goleada bilbaína, pero una pérdida de balón de Susaeta ante la agresiva presión visitante, esta vez de Castagene, abrió una vía por el centro de la defensa local. La aprovechó Pozuelo, todo clase, para servir a Bailey, quien en carrera batió a Herrerín,

Pasó por un rato de zozobra el Athletic, que temió el 2-2 en un gran disparo de Pazuelo que rozó la escuadra.

Pero, así como amenazaba sobremanera en ataque, forzando hasta siete córneres antes del descanso, el Genk cometía errores gruesos en defensa que acababa pagando caro. En otro de ellos, Colley cometió otro claro penalti sobre Raúl García transformó en el 3-1 sobriedad que marcó desde el mismo punto el 2-0.

La pegada, algo que le estaba penalizando en lo que va de esta Liga Europa, era lo que hoy le daba clara ventaja al conjunto vasco sobre un rival que, en juego, le había superado con claridad los primeros 45 minutos.

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La segunda parte siguió con la alocada dinámica de la primera y sin que se cumpliese el primer minuto Aduriz ya pudo lograr su cuarto tanto, a centro de Susaeta.

Se le marchó fuera el remate al donostiarra y poco después Ndidi sí acertó entre los tres palos de Herrerín. Tanto que logró poner el balón lejos del alcance del meta bilbaíno en un cabezazo a centro de Buffel.

Se le complicaba de nuevo el partido al Athletic, pero los leones tampoco se vinieron abajo y pusieron cerco a la meta del holandés Bizot. Sobre todo Aduriz, que a punto estuvo de marcar con un vaselina desde dentro del área tras jugada a balón parado y en un centro de De Marcos en el que se le cruzó Castagne.

No cesaba el balón de ir de área a área con peligro y Aduriz marcó su cuarto gol de la noche tras un gran pase desde campo propio de Yeray que definió perfecto, con la izquierda, ante Bizot.

Pero no estaba todo dicho porque ante un Genk irreductible y que se alió con la fortuna para acortar de nuevo distancias. Bailey caracoleó al borde del área ante Iturraspe y Susic, completamente solo, aprovechó un rechace suelto de Raúl para batir a Herrerín de tiro cruzado.

Se volcó el Athletic a por el quinto, lo buscaron con ímpetu los recién salidos al terreno de juego Iñaki Williams y Sabin Merino, pero fue de nuevo Aduriz el que lo consiguió transformando su tercer penalti de la noche, esta vez también claro de Ndidi sobre Williams.