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Mira

5, diciembre 2016 - 22:36

┃ Adolfo Peñaloza

Nota-Fut-moises-munoz

Momentos antes de abordar el avión con destino a Houston, donde ayer pasaron la noche para seguir el viaje a Japón, el portero del América, Moisés Muñoz, habló sobre el reto en el Mundial de Clubes. “Individualmente creo que ya vimos al rival al que enfrentaremos, pero en grupo todavía no, porque estábamos concentrados en los juegos de la Liguilla, pero ya tendremos tiempo de revisar muy bien a detalle al rival coreano, virtudes y defectos”.

Confesó que van a Japón con la sensación de revancha por el mal papel que ofrecieron en la edición anterior. “Queremos jugar contra Real Madrid y queremos también sacarnos esa espina que tenemos clavada del año pasado. Hemos aprendido mucho, llegamos un equipo más maduro con la experiencia de haber jugado ya ese Mundial de Clubes, y eso nos va ayudar bastante. Sabemos lo que representa y cómo se juega. Vamos con mucha ilusión de jugar frente a Real Madrid, y por qué no, pensar en hacerle partido a ese gran equipo”.

En la antesala de la final de la Liga MX dijo que los encuentros frente a los Tigres simplemente hablan del trabajo serio de los equipos. “Es correcto, la tercera final que ambos equipos vamos a disputar en los últimos años, eso habla del buen trabajo que están realizando las dos instituciones para estar siempre en los primeros lugares. Una final más que ojalá se venga nuevamente de nuestro lado. Les hemos ganado dos, una de Liga y otra de Copa. Ahora, en esta nueva final, esperamos ganarla para tener la estrella 13”.

Muñoz se refirió en entrevista con MVS Radio a la noticia de la contratación del arquero argentino Marchesín. “No es sencillo jugar bajo esas circunstancias. Lo mejor es tener siempre la mente tranquila, despejada, para pensar solamente en lo que estaba realizando, pero sí afecta definitivamente. Afortunadamente también fui capaz de hacer a un lado esa situación en los momentos del partido y funcionó, porque me concentré y afortunadamente gracias a Dios me ha ido bien. Ya después veremos qué pasa conmigo”.

Para hacer ameno el viaje de más de 15 horas, Moisés lleva un libro y películas suficientes.