Apenas fueron tres los peloteros mexicanos que debutaron en Grandes Ligas en el 2016, a pesar de un nutrido grupo de prospectos en las sucursales, quienes fueron superados por el zurdo Julio Urías y los derechos Luis Cessa y César Vargas, todos lanzadores.

Cessa y Urías dejaron un buen sabor de boca, lo que les garantiza estar de nuevo en el campo de entrenamiento del equipo grande de sus respectivos equipos, que ya tienen planes para ellos. Vargas, deberá pelear por un puesto, luego de una lesión que lo sacó de actividad gran parte del año.

CÉSAR VARGAS (24 años, 115 días)

El lanzador derecho poblano visitó nuestro país con los Padres de San Diego, incluso abrió el segundo choque de la serie que sostuvieron en la Ciudad de México ante los Padres de San Diego en el estadio Fray Nano, donde salió airoso.

Sus planes eran seguir mejorando en sucursales para en un futuro no muy lejano llegar a la gran carpa; eso sucedió más pronto de lo esperado, porque el 23 de abril tuvo su primera aparición en Grandes Ligas ante los Cardenales de San Luis en casa de los Padres. Tiró cinco innings en blanco, ganaban 1-0, pero Stephen Piscotty abrió el sexto rollo con cuadrangular y la posibilidad de obtener su primer éxito se esfumó.

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Tuvo siete aperturas, donde resintió en algunos encuentros estar en un modesto equipo, porque careció de respaldo ofensivo, su marca terminó en 0-3 en siete salidas. El cansancio cobró factura, al terminar en la lista de lesionados y por ello tendrá que volver a ganarse un lugar en el equipo grande o en la principal sucursal de los frailes.

LUIS CESSA (23 años, 349 días)

En menos de un año, las cosas cambiaron para el nativo de Córdoba, Veracruz, porque pasó de los Mets a los Tigres de Detroit y de ahí a los Yanquis de Nueva York, quienes le dieron la oportunidad tan anhelada de debutar en la gran carpa. Lo hizo como relevista el 8 de abril ante su antiguo equipo, como relevista. Finalizó con registro de 4-4, donde tuvo una cadena de cuatro fracasos al final de la temporada. Dejó una grata impresión en su manager Joe Girardi, que deberá confirmarla en febrero durante los entrenamientos primaverales.

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JULIO URÍAS (19 años, 289 días)

No estaba en los planes de los Dodgers de Los Ángeles llamar a uno de sus mejores prospectos más notables en los últimos años, pero las lesiones en el staff de abridores, donde también estuvo Clayton Kershaw aceleraron su llegada.

Tras un comienzo difícil, donde muchos pusieron en duda la decisión de la directiva californiana, terminó demostrando que los reportes de los buscadores eran ciertos.

Su presentación ocurrió el 27 de mayo ante los Mets de Nueva York, se salvó de perder, al lanzar apenas dos entradas con dos tercios, aceptó cinco hits para tres carreras, dio cuatro bases por bolas y propinó tres ponches,

Fue limitado al número de innings, vio acción en la postemporada ante los Cachorros. Terminó con marca de 5-2 en 77 entradas, otorgó 31 bases por bolas y propinó 84 ponches.