El primera base Saúl Soto pegó un sencillo para impulsar dos carreras en la undécima entrada y se convirtió  en el héroe de la victoria de los Cañeros de Los Mochis, 6-5 sobre los Águilas de Mexicali en la final de la Liga Mexicana de béisbol del Pacífico.

Con el triunfo, los ganadores tomaron ventaja de dos juegos a uno en la final que concluirá cuando uno de los dos rivales gane cuatro veces.

Con el partido empatado y hombre en segunda base con dos outs, el manejador de los Águilas Roberto Vizcarra tomó la decisión polémica de dar base por bola intencional al dominicano Leandro Castro; Soto respondió con un sencillo y la carrera anotada por el caribeño fue la de la diferencia.

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En su estadio en Mexicali, a unos 2.100 kilómetros de la ciudad de México, los Águilas tomaron ventaja en el primer episodio cuando el estadounidense Chris Roberson pegó hit, avanzó a segunda base con una rola de Jason Bourgeois y anotó con imparable del cubano Yunieski Betancourt.

El lanzador Kameron Loe colgó seis ceros con siete hits permitidos y ocho ponches pero al salir el norteamericano, sus relevistas tuvieron un bajo rendimiento y permitieron cuatro carreras de los Cañeros en el séptimo acto.

Doble de Eugenio Vélez, sencillos de Isaac Rodríguez y Lew Ford, pelotazo a Juan Carlos Linares, hit del dominicano Leandro Castro, un lanzamiento descontrolado (wild), boleto a Saúl Soto y elevado de sacrificio del cubano Yosmany Guerra pusieron delante a los Cañeros 4-1.
Parecía decidido el encuentro sin embargo los Águilas se rebelaron en el octavo capítulo y empataron con imparable de Jon del Campo, boleto a Ramón del Ríos, un lanzamiento descontrolado (wild), triple de Bourgeois para fletar dos y doble de C.J Retherford que empujó una.

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En el undécimo Isaac Rodríguez pegó sencillo en toque de bola y avanzó en un toque de sacrificio de Lew Ford; después de que el lanzador Edgar Osuna retiró a Sergio García, llegó la decisión de regalar pasaporte a Castro y por ahí se le fue el juego a las Águilas.

En el final del undécimo Mexicano descontó una carrera con imparable del cubano Yunieski Betancourt, wild, y sencillo impulsor de C.J Retherford, pero el relevista Sergio Romo dominó a partir de ahí y se anotó su séptimo salvamento en la postemporada.