La primera batalla entre Tigres y Pumas se jugó al más alto nivel. Esta noche no se espera menos del choque de vuelta. El boleto a semifinales de la Concachampions será el más atractivo entre los compromisos de cuartos de final. Todo quedará definido en CU.

Desde que se conocieron los cruces, éstos dos se colocaron dentro de los favoritos para llevarse el campeonato y la posibilidad de participar en el siguiente Mundial de Clubes. Hoy, uno de ellos quedará fuera, aunque se espera sea en un partido lleno de intensidad.

El silbante Fernando Guerrero fue el elegido por la confederación para pitar este compromiso, en el que habrá dinámica y llegadas en ambos arcos, lo que hará que la tripleta arbitral tenga que estar atenta al mínimo detalle. Marcos Quintero y Mario López serán sus auxiliares, con Luis Enrique Santander como cuarto oficial.

La clave para los norteños será abrir rápido el marcador y jugar con las emociones de su rival y la afición. Así piensa el técnico Ricardo Ferretti, quien en distintos foros ha reconocido la labor de Juan Francisco Palencia como estratega de Pumas. El “Tuca”, quien viven momentos de polémica en la Liga MX, ahora intentará mantener en esta competencia a su cuadro, que se quedó con las ganas en la edición anterior, tras perder la final contra América.

Ante una ofensiva como la de Tigres, que puede explotar en cualquier momento, Pumas ha recuperado a Matías Britos para hacer pareja con Nicolás Castillo, quien no ha necesitado tiempo de adaptación para dar resultados con este conjunto, que es cierto que viene de caer en la Liga ante el Querétaro, pero que ha hecho una apuesta importante por esta Concachampions.

Hay que recordar que no hace mucho estos dos planteles se enfrentaron en una final de Liga con el título para los norteños, que ha sido uno de los cuadros que más se le ha complicado a los auriazules en esta etapa, en la que han recuperado poderío en el Olímpico Universitario.

De ahí que este duelo sea un buen plato para los aficionados de ambas escuadras, quienes estarán al pendiente de lo que ocurra en esta cancha, en la que uno de los dos favoritos quedará fuera de toda posibilidad de continuar con el sueño del Mundial de Clubes.