El Real Madrid sufrió en Nápoles  en una primera parte superados por su rival y donde se pudo ver la falta de intensidad y  la poca ayuda en la defensiva de sus jugadores ofensivos. 

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Martens plasmó el dominio italiano con su disparo cruzado a la red a los 24 minutos y pudo firmar el segundo si no es por el poste de la portería de Keylor Navas.

También terminó en el poste   la llegada más peligrosa del Real Madrid en la primera parte, en una clara ocasión de Cristiano Ronaldo.

Tras la reanudación el equipo de Zinedine Zidane cambió su actitud y Ramos firmó dos tantos de cabeza en los minutos 52 y 57. Con la eliminatoria sentenciada Álvaro Morata firmó el broche a placer para cerrar el mismo resultado de la ida (1-3).

El Madrid firmó, con su triunfo en San Paolo ante el Nápoles, su séptima clasificación consecutiva. Los merengues no sufren una eliminación en octavos de final desde el 10 de marzo de 2010. El Olympique de Lyon fue su último verdugo tras caer 1-0 en terreno francés y empatar a uno en el Santiago Bernabéu en una noche negra para el madridismo.