Por Horacio Soto Castro
Arturo Macías ayer fue dado de alta hospitalaria e iba camino a su Aguascalientes y a pesar de la cornada que sufrió en el escroto la víspera en la plaza Vicente Segura, de Pachuca, se mostró feliz.
“Estoy viviendo un momento muy bonito -dijo Arturo- y estoy pasando por un gran momento en mi carrera. A pesar del percance corté las dos orejas y salí a hombros en Pachuca y mañana reapareceré como papá de un niño lo que me llena de felicidad”. Arturo ya es papá de una preciosa niña de 3 años de nombre Lucia.
Aunque la cornada no es grave, no deja de ser dolorosa y Arturo Macías pidió que lo vendaran para lidiar a su segundo toro.
“No podía dejar un toro en los corrales –expresó Arturo- pues había que triunfar. Le hice la faena y lo mate de un estocadón para que se me me concedieran las dos orejas y con ello salir a hombros. Con entrega, profesionalismo y triunfando se conquista el cariño del público que no tiene precio. Seguiré conquistando el corazón de los aficionados”.
Lo intervinieron en un hospital cercano a la plaza Vicente Segura de Pachuca. Lo atendieron debidamente y ahí paso la noche y ayer a medio día tomo carretera para Aguascalientes, donde permanecerá en reposo durante diez días.
De momento no pierde ninguna fecha y reaparecerá en Saltillo sin fecha todavía, pero el 1 de noviembre hará el paseíllo en la bonita plaza Jorge “Ranchero” Aguilar en la primera corrida de la feria de Tlaxcala, sin saber alternantes y ganado.
Arturo Macías añadió que esta muy contento y orgulloso de su carrera y lo que viene haciendo y ahora su mirada esta puesta en la corrida del 9 en la plaza México en la temporada grande en que alternará con Alejandro Talavante y Arturo Saldivar con toros de Marrón.
Desde que tomo la alternativa Arturo Macías no ha dejado de estar en la plaza México en donde saltó al estrellato y hasta el momento ha cortado 20 orejas y un rabo.
“Y estar nuevamente en la plaza México –agregó el de Aguascalientes- para mostrar mi toreo y seguir conquistando el corazón de los aficionados y no hay mejor forma que triunfando y espero salir nuevamente a hombros de ese magnífico escenario que me ha dado todo. Mantengo que el estar en el coso capitalino es una gran compromiso y una gran responsabilidad, pero siempre estoy dispuesto a responder. Estoy pasando por un gran momento en mi carrera y siempre preocupado por ser mejor torero”.
El mejor medicamento que se le esta suministrando a Arturo Macía para el percance es el saber la llegada de un nuevo ser.