Lejos de sentirse seguros de un nuevo “Aztecazo” como en aquel lejano 2001, la Selección de Costa Rica quiere hacer de lado la euforia y adrenalina para dar cabida a la cabeza fría y ser un equipo calculador que logre explotar sus armas para hacerle daño al Tricolor. Así lo manifestó el volante Celso Borges en la conferencia de prensa previa al juego de esta noche.

“Hay mucha euforia, pero tenemos que ser inteligentes y no dejarnos llevar por eso de querer ganar. Hay que hacer un partido inteligente y creo que tenemos las armas para hacer daño, pero no nos puede nublar la idea de ir como locos desesperados a buscar el resultado”, explicó.

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Por otra parte, el futbolista costarricense cedió la responsabilidad a México de buscar el duelo debido a su condición de local, aunque no negó el deseo que tienen de ser los protagonistas de las acciones.

“Quien está jugando en casa es México y nosotros vamos a querer tener un protagonismo en el encuentro, pero quien tiene responsabilidad es del local. Vamos a tratar de hacerlo lo mejor posible”.

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Finalmente, Borges reconoció que obtener un punto de visita no sería del todo malo, con todo y que el máximo deseo del pueblo tico es verlos con la victoria.

“Todo lo que podamos sacar de puntos es beneficioso. La gente nos quiere ve ganar y hay que tener inteligencia”, finalizó.