Se integró la selección mexicana que buscará su boleto al Campeonato Mundial de Boxeo, en Hamburgo, Alemania, durante septiembre próximo, en una segunda evaluación celebrada en el Centro Deportivo Olímpico Mexicano, con la presencia de la subcampeona olímpica de caminata Lupita González que volvió a subir a los encordados y recibió aplausos del público que asistió a presenciar los nueve combates de la función vespertina.

Los de cada pelea se ganaron el derecho de participar en el Campeonato Continental de Tegucigalpa, en Honduras, a celebrarse del seis al 12 de junio. El único que ya tenía su boleto asegurado y no peleó fue el capitalino Roberto Sariñana, en la división de los 64 kilogramos.

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En la división de los 46 kilogramos, el mexiquense Yoali Mejía se impuso al bajacaliforniano Gustavo Pérez, tres puntos a dos; en los 52 kg, el chihuahuense Carlos Zaleta superó al representante del Estado de México, César Herrera, también con pizarra de tres a dos; en tanto, en los 56 kilogramos, el colimense Christopher Flores venció a Iván Delgado, de Nuevo León 4 – 1.

EL gallo mexicano es una de las tres promesas que por sus resultados, forma de pelear y atributos innatos, pueden dar mucho de qué  hablar en un futuro próximo. Christopher le ganó a un rival que ya tiene un ciclo olímpico, quién buscó el año pasado en Azerbaiyán su boleto para Río 2016 y fue parte de los Guerreros en la Liga Mundial.

Comenzó en el boxeo porque sus compañeros de escuela le hacían bulling y su papá lo inscribió en un gimnasio para que aprendiera a defenderse, después de un mes sostuvo su primera pelea hace 10 años y ahora a sus 22 ha sostenido  97 combates y tiene la mira puesta en Tokio. Le gusta el boxeo técnico y es un contragolpeador.

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En los 60 kilogramos, el capitalino Alberto Mora venció al representante de Baja California José Alvarado, 4 – 1; en los 69 kg, en una de las peleas más reñidas y dónde hubo más intercambio de golpes, el mexiquense Edgar Reyes derrotó  al sinaloense Marco Martínez 3 – 2; en los 75 kg, uno de los boxeadores más carismáticos de esta nueva selección, el mexiquense Octavio Aguirre dio cuenta del sudcaliforniano Diego Moreno, 5 – 0.

Octavio, estuvo parado por una fractura en el 2016, de hecho ayer cumplió el año. Por su calidad,  enfrentó al campeón continental y seleccionado nacional Jesús Tizcareño en la eliminatoria de Jalisco. Dijo que quedó bien claro que se ganó el lugar en el equipo nacional, luego de practicar también la natación durante cinco años.

“Es una satisfacción enorme ver los resultados, todo el tiempo le he dedicado al boxeo desde chico, desde el 2011 y tener la oportunidad de representar a mi país a nivel internacional e incluso llegar a Tokio 2020 es el principal objetivo”, declaró el representante del Estado de México que tiene alrededor de 125 peleas, cuatro de ellas internacionales.

Foto Ramón Romero

Otro de los talentos de la selección, en los 81 kilogramos, el chihuahuense Rogelio Romero venció al jalisciense Carlos Rodríguez, por 4 – 1. Antes de ser boxeador jugó basquetbol en su natal Ciudad Juárez, en dónde apoya a su papá en una taquería. Tiene una contundente pegada y le gusta “volar como mariposa” (parte celebre de la frase del inmortal Ali).

No asistió a los Juegos Olímpicos  de Río, porque dijo le robaron la pelea en contra de un marroquí, en el preolímpico del año pasado. Su familia proviene de un rancho en Durango que se llama Nazareno. “De muy abajo” viene su familia. Su papá y sus tíos comenzaron a pelear en Gómez Palacio, de ahí trae la pasión por este deporte con una estatura de 1.91 metros.

Finalmente, en los 91 kilogramos Octavio Sandoval, del Estado de México, venció al capitalino Kevin Luján 5 – 0 y en más de 91, el chihuahuense Germán Heredia acabó por RSC en el segundo al sudcaliforniano Alan Romero.