La final de la Copa de Portugal, el próximo 28 de mayo, será la primera de una competición nacional que se disputará con la ayuda del videoarbitraje, informó hoy la Federación Portuguesa de Fútbol.

El encuentro se jugará en el Estadio Nacional de Jamor, a las afueras de Lisboa, y enfrentará al Vitória de Guimarães y al Benfica.

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Hasta la fecha, el videoarbitraje se ha puesto en práctica en el Mundial de Clubes y en varios partidos amistosos, entre ellos el que enfrentó a las selecciones de Francia y España el pasado 28 de marzo, en el que fue anulado un gol a los franceses y validado uno a los españoles con la utilización del nuevo sistema.

El objetivo del videoarbitraje es que auxiliares puedan ayudar al árbitro -en un margen de tiempo de escasos segundos- ante jugadas de trascendencia en el resultado final, tales como goles fantasma, penaltis, tarjetas rojas o identificación de jugadores.

El presidente de la Federación Portuguesa de Fútbol y vicepresidente de la UEFA, Fernando Gomes, aseguró que con este sistema “se crean las mejores condiciones posibles para que los árbitros desarrollen su trabajo y disminuyan los errores”.