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22, abril 2017 - 22:35

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Ibeth Zamora

LA mexiquense Ibeth Zamora, campeona del peso minimosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), lucha cada vez que se sube al cuadrilátero, como lo hizo  en la que fue su novena defensa del título, pero también libra otra batalla todos los días contra la violencia de género en su comunidad.

Zamora, de 28 años y profesional desde 2007, ha utilizado su fama para ayudar y representar a las mujeres de San Cristóbal Huichochitlán, una zona rural al norte de Toluca, Estado de México, en la que -dice- todavía se vive aquello de que “si eres mujer y te tratan mal, está bien y es normal y si te pegan, pues te tocó ser mujer y ni modo”.

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En una entrevista con Efe, Ibeth recuerda que desde niña sus padres la educaron a ella y sus hermanos para que no se quedaran con la idea de solo ser papá o mamá y cuidar a los hijos.

“Nos educaron de una forma diferente, pero tu ves que en tu entorno no es así y te das cuenta de que lo que está bien es educarte para ser mamá y ser ama de casa”, señala.

Ante este panorama, al que calificó de “un poco complicado” y del que sigue “aprendiendo”, Zamora comenzó a actuar y dar “otra pelea” para ayudar a sus congéneres.

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La púgil, quien estudia en línea derecho internacional en la Universidad Autónoma del Estado de México, se dedicó a apoyar a las mujeres víctimas de violencia. “Tratamos de dar apoyo y dirigirlas ante las instancias adecuadas para que las asesoren”, apunta.

La propia Ibeth no deja de ser señalada y a pesar de que ha demostrado que es una deportista de alto rendimiento, con 32 peleas -27 triunfos y cinco derrotas-, sigue siendo objeto de insultos en idioma otomí, que se habla en su comunidad y en algunos estados de México.

“Los hombres dicen en otomí ‘es una machorra’, (mujer que desarrolla una actividad que convencionalmente se atribuye a los varones) porque tengo una actividad diferente a lo que ‘debe de hacer’ una mujer”, afirma.

Aunque ese comportamiento le duele, dice, “tienes que mostrar fortaleza para que puedas ayudar a quienes también sufren algún tipo de violencia, (ya) sea física o sicológica”.