El clavadista Yahel Castillo, luego de una pausa obligada de un año, regresará a la competencia para buscar un boleto que lo lleve al Campeonato Mundial de Natación en Budapest, Hungría, en julio del año en curso.

Diversas circunstancias le impidieron asistir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en trampolín de tres metros, pero una vez recuperado anímicamente y con la madurez que le ha dado la vida, Yahel es un deportista renovado.

“Me siento muy contento, porque estoy trabajado duro, llevo al pie de la letra todo lo que mi entrenador planeó en esta temporada; me siento bien, más fuerte, más rápido y más flexible después de la pretemporada que tuve y se ven los resultados con mis clavados de competencia”, declaró el clavadista que participará durante el Campeonato Nacional, en Guadalajara, Jalisco, el 18 de mayo.

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El certamen integrará a la selección que representará a México en el Mundial de Budapest y los Juegos Mundiales Universitarios. Para Yahel significa una nueva oportunidad de aprovechar su talento, además de que tiene  muchas ganas de volver a competir, es consciente de que el día se acerca y para ello se ha preparado en las instalaciones del CNAR.

Afirmó que el objetivo es muy claro: los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Para Guadalajara tratará de asegurar su calificación con evoluciones que siempre ha hecho, pero incrementará el grado de dificultad para las competencias internacionales futuras.

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Todas las competencias son diferentes, hay ocasiones que se puede ganar con 500 puntos, otras con  520 o 530,  no se logra subir al podio. Lo único que tiene un clavadista es enfocarse y en cada salto con ocho de calificación se rebasa el primer obstáculo.

A Yahel lo han apoyado en su rehabilitación y entrenamientos en el CNAR. La experiencia le ha dado la tranquilidad, pero también afirmó que en este ciclo olímpico tiene “hambre de ganar”.