Los dueños y la NFL aprobaron el cambio de escenario durante la reunión primaveral celebrada en Chicago, donde también determinaron que la ciudad californiana aún hospedará el Súper Tazón, pero en su edición 56, que se celebrará en febrero de 2022.

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La decisión se llevó a cabo tras el anuncio por parte de Carneros y Cargadores de Los Ángeles de aplazar por un año la inauguración de su nuevo estadio, ubicado en Inglewood, debido a las fuertes lluvias acontecidas en invierno, las cuales retrasaron los trabajos del equipo de construcción.

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El complejo deportivo inició su construcción en noviembre de 2016 y su inauguración estaba prevista para 2019, sin embargo, los contratiempos provocaron el aplazo en los avances en las obras y, por ende, en su apertura, la cual se realizará hasta 2020.