Sochi.- Así  como a la fecha el aficionado mexicano se pregunta el por qué no jugó Hugo Sánchez en los octavos de final de la Copa del Mundo de 1994, ahora el nuevo seguidor mexicano se hará esa misma interrogante, pero ahora en la persona de Carlos Vela en la Copa Confederaciones de Rusia 2017.

En ese Mundial, Miguel Mejía Barón era el técnico nacional, se reservó al ídolo mexicano de esos años. Solamente calentó y no ingresó al vital duelo contra Bulgaria, por lo que no participó en el tiempo regular y tampoco en los fatídicos penaltis.

Hugo todavía era el ídolo en el inicio de la década de los 90, era su último Mundial, llegaba de una productiva carrera en el Real Madrid, Atlético de Madrid y Rayo Vallecano, pero el entrenador se lo guardó como también ocurrió con Carlos Vela en la semifinal contra Alemania.

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Juan Carlos Osorio no lo alineó  ni de titular y menos lo ingresó en el complemento. Decidió por Giovani dos Santos en el once inicial. En sus cambios metió a Hirving Lozano, Rafael Márquez y Marco Fabián.

El “Bombardero comió” banca, pese a también arribar a la Confederaciones con un gran nivel en la Real Sociedad. El jugador se negó por cuatro años representar a México y hoy que pudo explotar en un duelo tan trascendental frente a la campeona del mundo, Osorio lo guardó porque según, “creímos que jugar como extremo le iba a costar más y por el físico nos decidimos por Raúl Jiménez”, dijo el entrenador en conferencia de prensa.

Vela había firmado un gran torneo de la Confedarciones al dar grandes encuentros contra Portugal y Rusia en donde no anotó, pero su movilidad y fuerza abrieron a los rivales, por lo que generó una asistencia de gol. No obstante, no estuvo en el duelo en el que México podía hacer historia.

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