GUADALAJARA (México).- Entrada regular en el Nuevo Progreso en la corrida con que se puso en marcha la temporada. El festejo denominado de las tres “eses” no atrajo al público que se esperaba. Y los astados de Arroyo Zarco, de buena presencia, pero de juego irregular, no se prestaron para el mayor lucimiento de los matadores. Fueron ellos los que le pusieron su tenacidad y voluntad para sacar algunos buenos momentos.

Tampoco rompió la tarde en el quinto. Arturo Saldívar pudo dejar detalles sueltos en una labor que no compactó. Tampoco mató bien, en el sino de todo el festejo. El público se dividió en su respuesta final.

Puesto que el cuarto toro, deslucido y difícil, no sirvió para el triunfo de Juan Pablo Sánchez, éste decidió anunciar el regalo de un sobrero, que hará séptimo de la tarde. Pese a todo, Juan Pablo le buscó las vueltas a lo poco bueno que tuvo el cuarto. En su primero, el más manejable, lo hicieron salir al tercio. En el de regalo tampoco tuvo opciones y fue ovacionado luego de media y al segundo golpe de descabello.

Diego Silveti fue silenciado ante el tercer toro, un ejemplar que se movió y por el que el público tomó partido. Mató de buena estocada el azteca. En su segundo volvió a mostrar su capacidad, pero mató mal y se retiró en silencio.

También se le resistió la espada a Arturo Saldívar, en su caso en el segundo toro. Valiente y despejado de mente, Saldívar dio forma a una faena de buena nota, pero no mató bien.
Plaza de toros de Guadalajara. Primera de la Temporada. Toros de Arroyo Zarco. Juan Pablo Sánchez, al tercio, ovación, ovación en uno de regalo; Arturo Saldívar, silencio tras aviso y división, y Diego Silveti también tuvo silencio en su lote.