Así como el  estadio Hidalgo pasará a la historia por albergar el primer partido de la liga femenil entre Pachuca y Pumas , también quedará enmarcado, de por vida,  en los libros deportivos el primer gol marcado.

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Y el nombre que permanecerá tatuado para la posteridad es el  de Berenice Muñoz, jugadora del Pachuca, quien en la parte complementaria puso el tanto que inaugura de manera oficial la Liga Femenil de Futbol Profesional.

Asimismo, Muñoz se convirtió en la primera jugadora en marcar un doblete, en el partido en el que se impusieron la Tuzas por marcador de 3-0 sobre las felinas. La tercera anotación corrió a cargo de Mónica Ocampo.  

Histórico fue el comienzo de una nueva era en el futbol femenil en México. El inicio del profesionalismo para las mujeres llegó.