El 29 de Noviembre de 2016 Alan Ruschel era uno de los 71 pasajeros del vuelo 2933 de Lamia donde viajaba el Chapecoense de Brasil, previo a enfrentar el partido más importante de su historia, la final de la Copa Sudamericana ante Atlético Nacional. Sin embargo el destino le jugaría una mala pasada al conjunto brasileño, dejando una de las más grandes tragedias en la historia del deporte.

Hoy, 9 meses después de aquel día trágico, el defensor brasileño se vuelve a poner los tacos y encarar un partido de futbol, nada más y nada menos que ante Barcelona, por el trofeo Joan Gamper en el Camp Nou.

Alan fue el primero de los sobrevivientes en salir del hospital, 2 semanas después del accidente, con varios golpes fuertes y las piernas dañadas, era difícil pensar en volver a verlo en una cancha de futbol, sin embargo, en propias palabras del jugador, el cariño y apoyo de la gente lo motivó a luchar para regresar a jugar:

“En un principio estaba gradecido por mantenerme vivo, pero la gente nunca dejó de apoyarme, de alentarme a mi y a mi familia. Creo que volver a jugar es también un homenaje y una linda de forma de recordar a todos los amigos que perdí aquél día”.

El partido en Barcelona será el primer juego que dispute desde el accidente, mismo encuentro que el club catalán organizó y todo lo recaudado será destinado para el “Chape”, además de varios eventos a beneficio de las familias de las víctimas.

Otros que también estarán presenten en el Camp Nou son el arquero Jackson Folleman, quien perdió una de sus piernas y el también defensor Helio Neto, sobreviviente de la noche oscura del 29 de Noviembre.