EFE

La Federación de Albania recurrirá las decisiones del Comité de Disciplina de la UEFA, que consideró “extrañas” e “injustas”, ya que este organismo decidió dar por finalizado con 3-0 para Serbia el partido suspendido en el minuto 41 y multar a ambos equipos con 100.000 euros.

“Nosotros no estamos satisfechos, continuaremos la lucha según las reglas legales y solicitaremos los tres puntos de la victoria”, declaró hoy en una rueda de prensa el representante legal de la Federación Albanesa (FSHF), Artan Hajdari.

El primer ministro albanés, Edi Rama, escribió en su cuenta personal de Twitter que “la FSHF hace bien en iniciar una batalla legal”. “Hoy no se hizo justicia con lo que sucedió en el estadio de Belgrado”, dijo.

La Comisión de Disciplina de la UEFA decidió otorgar la victoria a la selección de Serbia (3-0), aunque le quita tres puntos en la fase de clasificación para la Eurocopa 2016 y le obligará a jugar sus dos próximos partidos en casa a puerta cerrada, además de pagar una multa de 100.000 euros igual que Albania.

“Esta decisión no solamente es extraña, sino tiene una simetría que no existe. Se condena a jugar sin afición y no obstante se les dan tres puntos. Además la decisión siguió la lógica de la presión y las declaraciones políticas” de las autoridades serbias, indicó Bardhyl Minxhozi, representante de la FSHF.

El partido Serbia-Albania, disputado el pasado día 14 en la fase clasificación para la Eurocopa de Francia 2016, se suspendió en el minuto 41 por los incidentes ocurridos tras la irrupción en el campo de un dron, accionado por control remoto, con una bandera del mapa de la “Gran Albania”, un proyecto nacionalista que reúne territorios poblados por la etnia albanesa.

A continuación decenas de hinchas serbios invadieron el campo y agredieron a futbolistas albaneses, después de que en los minutos anteriores se escuchara corear entre los aficionados serbios “¡Matad a los albaneses!”.

“Nosotros fuimos los violados y la condena de la UEFA es prácticamente igual para ambos equipos”, dijo Ilir Shulku, secretario general de la FSHF, que calificó la decisión de “compromiso que no funciona”.

Asimismo, el entrenador italiano de la rojinegra, Gianni de Biasi, dijo sentirse “decepcionado” por la decisión de la UEFA. “Nos quita lo que habíamos ganado en el campo”, dijo.

El partido se suspendió con el resultado 0-0, cuando faltaban menos de cinco minutos para el final de la primera parte.

Las tensiones en el campo agravaron la situación política entre ambos países, históricamente rivales por la cuestión de Kosovo, antigua provincia serbia poblada en mayoría por albaneses étnicos, que proclamó unilateralmente la independencia en 2008.

Debido a este clima de tensión, se aplazó la visita a Serbia del primer ministro albanés, Edi Rama, prevista para el 22 de octubre.

La decisión de hoy de la UEFA también ha sido criticada por la clase política albanesa.

Para el diputado del Partido Socialista Erion Brace es “repugnante” y “política” y favorece la violencia y el racismo en el fútbol.

La diputada del Partido Conservador Democrático Mesila Doda la comparó con las tomadas por los tribunales albaneses, considerados por los internacionales como los más corruptos de Europa.

La selección albanesa tiene 4 puntos, mientras que Serbia 1. Ambas compiten en el grupo 1 junto con Portugal, Dinamarca y Armenia.