Día y noche sin parar. Los últimos días de Alex Aguinaga se convirtieron en un estilo de vida en donde el ex jugador los utilizó para apoyar en los acopios de la Ciudad de México y aportar su granito de arena, ya que para él “no sobran manos”.

“Lo que pasó es terrible. La naturaleza no hace diferencias: Raza, color, sexo, edad y nacionalidad. Estamos aquí para aporta porque las manos nunca están de más. Siempre va a faltar ayuda de todos y es mejor amontonarnos un poco” aseguró. “La gente debe de estar consciente en acudir a los centros de acopio para aportar”, declaró el ídolo necaxista.

No está solo, va acompañado y da ejemplo de vida. El ecuatoriano llegó al estadio Azteca acompañado de su esposa e hijas, quienes desde temprano se dieron cita en el Coloso de Santa Úrsula para unirse a lo acontecido el pasado martes 19 de septiembre.

“En la desgracia, el ser humano tiende a unirse. Te lo digo por experiencia. Cuando en Ecuador pasó el terremoto del año anterior, en seguida se hicieron presentes los mexicanos. Ahora vemos en México a los latinos, japoneses, europeos, israelís que vinieron personas muy valiosas para colaborar, y los que no vienen, están desde sus trincheras ayudando, depositando o mandando víveres: Es lo importante del mundo”, aseveró Aguinaga para el diario de los deportistas. (Juan Carlos Cerda/ Foto: José Luis García)