TOLUCA.- El Nemesio Díez abrió sus puertas para que los aficionados de los choriceros pudieran ver el entrenamiento de los Diablos Rojos del Toluca. La única condición para acceder al inmueble, fue dar la moneda que saliera del corazón para la Cruz Roja Mexicana.

El futbol sirvió como un pequeño catalizador, fue un momento de tomar aire, pero no de olvidar la situación. Muy rápido en la práctica, todos los hinchas que se dieron cita en el “Infierno”, comenzaron a gritar al unísono “México, México, México”.

Los jugadores del Toluca se vieron asombrados por la convocatoria, por la solidaridad y por la fuerza de México. Aplaudieron el tradicional “Siquitibum”, se mostraron conmovidos y aún así, trabajaron a tope con el juego ante Pumas de media semana en la cabeza.

Después del tradicional entrenamiento, algunos afortunados aficionados tuvieron la oportunidad de jugar fut-tenis con sus ídolos, por lo que la alegría estuvo presente en cada momento.

Los “Pingos” tendrán la sartén por el mango. Son locales y quieren extender su buen momento a costa de unos alicaídos felinos que no ven la suya.