POR JAVIER JUÁREZ
FOTOS: ÉRIK ESTRELLA
ENVIADOS ESPECIALES

ZAPOPAN. – A Toño aún le duelen los cuatro picotazos que le propinó el América la temporada anterior, las lágrimas en su rostro al finalizar el partido lo decían todo, el portero rojiblanco quedó devastado, desde ese momento ha esperado la revancha frente al equipo azulcrema, ese día ha llegado: “Ese partido me dejó dolido, me dejó una cicatriz, nunca lo voy a olvidar, después de esa noche me enfoqué en salir contra el América como un león, como un tigre, darle la vuelta a lo que pasó y demostrarme a mí mismo de lo que soy capaz”, resaltó el portero tapatío.

Las críticas que cayeron ese día sobre Rodríguez fueron muchas: “Esa herida sólo va a sanar ganando, quiero darle la vuelta a ese partido, silenciar muchas bocas que hablaron esa ocasión”, expresó Toño.

El espigado cancerbero quiere ganar como sea, hasta no hacerlo no dormirá en paz: “Es una espinita clavada, nunca voy a olvidar lo que pasó, sea la primera o décima vez que enfrente al América, la única manera de darle la vuelta a esa situación es ganando, no importa cómo ni cuánto, me da igual un 10-9 o 1-0, como sea pero ganar. Ojalá Chivas lo haga, salir el sábado con una sonrisa y con las manos arriba”, pidió Rodríguez.

Los 18 puntos de diferencia que existen entre América y Chivas no le dicen nada al portero rojiblanco: “Somos once contra once, la pelota rueda igual para ambos, tenemos que demostrarlo en el partido, no importa si ellos tienen 50 puntos o nosotros nada”, resaltó.

El chiverío tiene la calidad suficiente para cortar el vuelo del líder: “Nosotros tenemos gente capaz, gente probada, jugadores con un nivel impresionante, tarde o temprano tienen que despertar, la noche no dura para siempre”, expresó el cancerbero jalisciense.

A Toño no le gustaría ser el héroe, él prefiere el éxito colectivo: “Créeme que no pienso en eso, lo individual lo dejo a un lado, esto es un juego de conjunto, para mí lo importante es que Chivas gane, no otra cosa”, remató Rodríguez.