.- Con un gol de campo de Kai Forbath a 16 segundos del final, los Vikingos de Minnesota derrotaron 20-17 a los Osos de Chicago en el cierre de la Semana 5 de la NFL.

La presentación de Mitchell Trubisky no fue como la esperaba. El Soldier Field recibió de gran forma a su nuevo quarterback, quien cerca estuvo de darles su segundo triunfo de la campaña. A estas alturas, el novato ya sabe que un error en esta liga lo va a pagar caro.

Desde el inicio fue un juego muy cerrado, con las defensivas imponiendo condiciones. Fue precisamente la retaguardia de Chicago la que abrió el marcador. Un ‘saefty’ a Sam Bradford cortesía de Leonard Floyd hizo soñar a sus aficionados. Minnesota iba a responder con un gol de campo de Forbath a 1:26 de la culminación de la primera mitad.

El 3-2 reflejaba con claridad lo que había acontecido sobre el emparrillado. Para el complemento, las ofensivas entraron en ritmo, y con la ayuda de los equipos especiales fueron acercándose a las zonas prometidas.

Kyle Rudolph iba a realizar el touchdown para unos Vikingos que contaron con el gran aporte de su corredor novato Jerrick McKinnon, quien a priori era su tercer hombre en el ‘backfield’. Una escapada de 58 yardas puso a su equipo a un paso del triunfo.

Chicago iba a reaccionar de la mano de Trubisky. Lanzó el primer pase de anotación en su carrera a las manos de Zach Miller, y fue justo él quien convirtió la conversión de dos puntos para igualar la pizarra a 17.

Cuando el novato se veía con más confianza, lanzó su primera intercepción en la NFL. Costosa, claro está. Minnesota estaba en campo contrario con el reloj llegando a su fin. El resto fue historia, Forbath se vistió de héroe en el mítico campo del Soldier Field.

Al final Trubisky terminó con 128 yardas, un envío de TD y una intercepción. Mientras que el novato de los Vkingos, el corredor McKinnon, se destapó con 95 yardas y una anotación.