Guadalajara.- En la historia del Clásico de Clásicos, son contados los futbolistas que ingresan a sus memorables páginas de añeja rivalidad. Omar Arellano, hoy sin equipo en el futbol profesional, vacunó a las Águilas al firmar un doblete en la edición del Apertura 2008, una actuación que lo hizo figura aquella noche en el estadio Azteca.

“Sí hay un odio deportivo hacia el América”,compartió. “Son los partidos en donde hay que levantar la mano, son los partidos que más me gustaba jugar. Ese sabor, esa piel de gallina que se pone antes del protocolo, esa sensación es algo único”, aseguró con una sonrisa.

Son encuentros que cambian la vida futbolística, sensaciones incomparables que solamente experimentas en un Clásico Nacional. Arellano Riverón todavía recuerda ese balón al ángulo que rindió a Guillermo Ochoa y su orgulloso pasado rojiblanco.

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“Soy Chiva, lo tengo en la sangre, por ser la tercera dinastía y lo que significó en mi vida, desde la cuna siempre fui Chiva. Disfruté mucho esos cinco años, los Clásicos Nacionales, los goles que hice, es algo que marcó mi carrera”, confesó Arellano.

En el inicio de cada torneo, la “Pina” ponía al Clásico de Clásicos en el radar rojiblanco, se contaban los días para enfrentar al cuadro emplumado, no importaba la fecha o la sede, disfrutaba al máximo el entorno que atrapa un Chivas vs. América.

“Son semanas que se viven distintas, porque hay más medios, entrevistas, especiales, se habla toda la semana del Clásico Nacional. Yo creo que no se ha perdido esa rivalidad. Son partidos diferentes, no los puedes perder, son lo más relevantes de la fase regular”, acentuó el jugador tapatío en entrevista para el ESTO.

MIRA ESTO

Goles con Chivas en Clásicos Nacionales

Apertura 2008            2

Bicentenario 2010      1