Guadalupe.- Juan Pablo Carrizo se convirtió en el héroe de Rayados en los octavos de final de la Copa MX al atajar dos penaltis frente a los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara, pero el portero llamó a guardar la calma, porque aún hay mucho trecho para levantar el trofeo copero.

“Trataba de estar lo más sereno posible en los penales, consideró que hay que tener algo de fortuna. Nosotros estamos muy entregados, a veces hay que adivinar, hoy me tocó viajar de un palo a otro y estaba tranquilo nada más”, explicó el argentino. “Teníamos entendido que el partido iba hacer así los 90 minutos, fueron difíciles, nos tiene que servir para lo que viene. Estoy contento con mi labor, pero hay que tener los pies sobre la tierra, no hicimos nada y queda mucho camino”.

El cancerbero destacó sobre todo la actuación de sus compañeros y la unión del grupo, misma que los llevará a beberse la copa y hacerse de la liga.

“Logramos todos trabajar y lo individual destacar el grupo va crecer, adelante de la individualidad, debe estar el valor del grupo, porque sino no vamos a ninguna parte. Hoy aunque no hicimos un gran partido, el grupo estuvo unido”, finalizó el guardameta.