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Mira

4, noviembre 2017 - 20:55

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CRÓNICA

El exceso de partidos le ha pasado factura a Monterrey, es una realidad, sin embargo, ayer en la
cancha de los Lobos BUAP fueron incapaces de generar una verdadera opción de peligro, incluso el
gol de vestidor con el que movieron el luminoso fue circunstancial.

La manada quiso, insistió, puso lo que se tenía que poner, pero enfrente tuvieron a un Juan Pablo
Carrizo en plenitud de forma. De milagro, Lobos encontró la acción que los hizo remontar el
marcador y ganar 2-1.

Antonio Mohamed tendrá que trabajar para recuperar a sus jugadores para el Clásico Norteño de
la última jornada, pero sobre todo, para cerrar de la mejor forma y entrar con ritmo a la liguilla.

EL JUEGO

Apenas los aficionados se acompañan en el estadio Universitario BUAP, cuando las redes ya se
habían cimbrado.

Parecía el round de estudio. Rayados había intentado irse al frente sin éxito y Lobos hacía ancha la
cancha para quedarse con la posesión, sin embargo el error cayó muy rápido.

Lucero Álvarez intentó reventar la esférica en busca de ganar por aire, sin embargo, la caprichosa
se estrelló en el abdomen del flamante seleccionado colombiano, Avilés Hurtado, y se clavó en la
meta ¡Sin querer, queriendo!

A partir de entonces Lobos quiso irse al frente para revertir la situación, en tanto que Rayados
hizo del balón aéreo su arma favorita.
Eduardo Tercero se animó a ofender por la pradera izquierda y dejó en las piernas de Quiñones la
oportunidad de rematar, pero Carrizo arropó la redonda entre sus brazos.
El histórico goleador de los Licántropos también tuvo la suya. Serie de rebotes en el área que
aprovechó para sacar un fogonazo. La redonda se fue por un lado.
A balón parado, Rayados tuvo la chance de ampliar su ventaja. César Montes y Jesús Molina
ganaron por arriba, pero no lograron herir a los Canis Lupus.
Lo más preocupante de todo fue la incertidumbre de Lucero Álvarez, pues volvió a ceder la
posesión al intentar salir con balón controlado. Celso Ortíz disparó de media distancia, por fortuna
para el meta, se fue desviado.

Los pupilos de Rafael Puente intentaron apresar a su rival. Diego Jiménez volvió a mandar el
centro raso para Julián Quiñones. Pablo Carrizo fue mejor y le ganó la partida al ofensivo.
Fue el mismo Jiménez el hombre que logró que el Lobo volviera a aullar. Luego de una serie de
rebotes, el delantero prendió de volea la bola y la mandó a guardar ¡50 aullidos!
En el complemento, los Lobos se mantuvieron al asecho. Quiñones se sacó de encima a dos
defensores de Monterrey y quedó listo para rematar y fusilar. Carrizo brindó sobre el balón y evitó
el remate. Jugada para el anecdotario.
Luis Advincula también se fue al frente. Centró raso del peruano para Diego Jiménez. El mexicano
remató de primera y Carrizo se quedó la de gajos.
El gol quedó a un silbatazo. Tiro de esquina que cobró Advincula, balón peinado en el área y
contrarremate de Quiñones que se encontraba en posición adelantada.

Rayados dejó de meter las manos. Sus rivales volvieron a tener chance, está vez, a balón parado.
Tiro libre de Carlos Morales que le sacó pintura al travesaño ¡uff!
Lobos nunca bajó los brazos. Tiro de esquina cobrado por Advincula. La zaga intentó cortar la
chance y el balón quedó a la deriva. Caprichosamente cayó en los pies de Quiñones y la mandó al
fondo. ¡Mordida letal!
La última del partido llegó. En el área fue derribado Quiñones ¡Penalti para Lobos! El delantero
mandó el penalti por un costado
La Pandilla se quedó con las ganas de mucho más, pero se conformó con el empate. Ahora
deberán preocuparse por el duelo ante Tigres de la última jornada.

MxM

GOLES

Avilés Hurtado abre el marcador

Lobos marca el empate

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