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Mira

14, noviembre 2017 - 13:51

┃ Luis García Olivo

méxico

 La gira europea terminó. Grandes países y ciudades acogieron a la Selección Nacional en busca de tener la mejor preparación para el Mundial ruso en donde nuevamente pisará tierras del viejo continente como lo fue en esta ocasión.

Bélgica y Polonia regalaron grandes tardes, bellos atardeceres y un frío muy penetrante en tiempos invernales. Los Diablos Rojos y las Águilas  Blancas demostraron ser un buen sinodal para el Tricolor. El equipo de la capital de Bruselas fue más pieza, es el quinto lugar en el ranking FIFA, por ello el partidazo de ambos en el estadio Rey Balduino.

Polonia, número 6 de la calificación, no fue la esperada, posiblemente no le dio el mejor de los valores y jugó a la suerte, en ese andar se vio superada por la mínima diferencia.

Los chicos de Osorio le dieron la importancia debida a los dos compromisos. Contra Bélgica jugaron de manera casi perfecta. Un vibrante 3-3 dejó perplejos a los miles de asistentes de los Diablos Rojos.

Lukaku, los hermanos Hazard y De Bruyne reconocieron la capacidad de los nuestros. Guardado e Hirving Lozano se encargaron de darle forma a la igualada. El Chucky se llevó la noche con par de golazos y elevó sus bonus en el viejo continente.

Ya para el juego contra Polonia y debido a las complejidades para formar un once inicial, Osorio rotó posiciones y jugadores. Apostó a su método y estaba obligado a realizarlo, lo bueno fue que le dio resultado debido a que ganaron por la mínima diferencia con gol de Raúl Jiménez.

El análisis tras la conclusión fue más que positiva para los dirigidos por Osorio. Duelos de este tipo los enriquece en todos los sentidos. Jugar en Europa y contra potencias tiene su peso específico y muchas veces son más benéficos que los propios “moleros” en suelo estadounidense.

Jugadores y cuerpo técnico saben que este tipo de duelos son los ideales para llegar en buena forma al Mundial porque dejan atrás el confort y entran en una alta complejidad contra selecciones y jugadores de primer nivel como en esta ocasión lo fue Bélgica y Polonia.

LA MALARÍA

No todo fue redondo en el viaje por Europa, las lesiones, las “malditas lesiones” nuevamente hicieron de las suyas. Edson Álvarez, Javier Hernández, Héctor Herrera y Giovani dos Santos no pudieron estar contra Polonia, por lo que causaron baja y no pudieron ser observados por Osorio, sin embargo, los “europeos” cuentan con cierta ventaja sobre el resto de la plantilla.

Además de los lesionados,  Jesús “Tecatito” Corona tuvo que volver a casa lo más rápido posible debido a que su esposa perdió un bebé, situación que  ameritaba dejar al Tricolor en su gira.

PREMIADO

En plena Europa, Javier Hernández era anunciado como uno de los ganadores del Premio Nacional del Deporte, por lo que se le empalmó con la celebración de 100 duelos con el Tricolor. No obstante, ese  mismo día se lesionó contra Bélgica.

PALMAS

El que fue punto y aparte en dicha gira resultó ser Hirving Lozano, el Chucky confirmó que tiene tela para ser el nuevo referente y símbolo de la Selección. El jugador no se conformó con sus goles en el PSV y llevó su buena racha a la Selección para anotar en par de ocasiones frente a Bélgica.

SORPRESAS

Uriel Antuna y Omar Goeva fueron las novedades en esta gira. Ambos fueron las caras nuevas en el representativo mayor, ya que han jugado en inferiores. Los dos causaron buenas impresiones, pero únicamente Omar pudo debutar. Uriel tendrá que esperar, ambos fueron criticados por su llamado, pero por estar en Europa deben demostrar que su llamado no fue obra de la casualidad.

EXTRACANCHA

Los líos que envuelven a Diego Rayes y Héctor Herrera con los  Paradise Papers buscaron desestabilizar a la Selección. El defensor aclaró su situación y solamente esperan que el tiempo resuelva todo en un problema donde sus nombres están envueltos.

MUCHA RAZA

Nuevamente quedó claro el arrastre de la Selección. En todas partes hay paisanos y en Bruselas y Gdansk se dejaron sentir. No les importó el frío o el largo recorrido, algunos hicieron el viaje desde nuestro país y unos más desde otros países de Europa para ver a la Selección. El amor hacia el Tricolor es total.

APRENDIZAJE

Ya lo dijeron los protagonistas tras la conclusión de la gira, el aprendizaje de jugar en Europa contra estas dos selecciones fue demasiado porque descubrieron en dónde están situados, fueron exigidos y no tuvieron el calor en las gradas, puntos más que importantes para valorar. Por  esto y muchas cosas más agradecieron todo lo que se llevó a cabo en Europa. Gracias viejo continente, gracias Europa.