La pierna derecha de Blair Walsh se quedó corta en el intento de salvar a su equipo y mandar el juego a tiempo extra.

En un juego con un final agónico, los Halcones Marinos de Seattle perdieron en casa 34-31 ante los Halcones de Atlanta en el cierre de la Semana 11 en la NFL.

El CenturyLink Field presenció un tiroteo aéreo que cerca estuvo de prolongarse hasta el agregado. En los últimos segundos, cuando el reloj llegaba a su fin, Russell Wilson guió su ofensiva hasta territorio de gol de campo. Pese a que no era una patada segura, al ser de 52 yardas, estaba en el rango de Walsh, quien le puso dirección pero no fuerza.

El ovoide llegó únicamente hasta el área de anotación, decretando de esta forma la cuarta derrota de Seattle en la campaña.

Al inicio de la contienda, fue la ofensiva de Atlanta el que impuso condiciones. Matt Ryan y compañía sabían que sin la “Legión del Boom” la secundaria de los Halcones Marinos era su punto débil y los empezó a atacar con Mahamed Sanu y Julio Jones a lo profundo. Fue justamente por la vía aérea la forma en que encontraron los dos primeros touchdowns para el 14-0 parcial.

Los locales respondían por las únicas vías que les concedió el campeón reinante de la Conferencia Nacional. Jimmy Graham explotaba la zona de linebackers y el propio Walsh hizo efectivos los tres goles de campo que dispuso.

Cerca del final, y con ventaja de diez tantos, la visita bajó el ritmo y dejó que los pupilos de Pete Carroll se acercaran tras la anotación de Doug Baldwin y la conversión de Graham. La defensiva hizo el trabajo parando a los Halcones en tres jugadas y aún le dieron la última oportunidad a su ataque. Así culminó el ‘Monday Night’ de la Semana 11.

Matt Ryan comandó el triunfo de Atlanta al completar 19 de sus 27 envíos para 195 yardas y dos touchdowns. Sin Devonta Freeman en el ‘backfield’, Kevin Coleman cargó con el ataque terrestre con 43 yardas y un TD.

Por Seattle, Wilson acertó 26 de 42 para dos anotaciones y una intercepción.