William da Silva es alguien directo y frontal, por lo que no tuvo inconveniente en aceptar la responsabilidad que América tiene en esta Liguilla, misma a la que se refirió como una obligación, ya que para él, la institución demanda siempre alcanzar los logros más altos y así se debe entender desde que firmaron su contrato.

“Siempre estamos obligados en este equipo por la grandeza que tiene. Juguemos lo que sea, siempre estamos obligados a ganar, entonces nosotros sí tenemos la obligación de salir campeones y lo sabemos; es una responsabilidad que cuando firmamos el contrato todos sabíamos que íbamos a tener y estamos enfocados y con mucha disposición para estar ahí”, expuso comprometido.

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La posición en la tabla general permitirá que América cierre la serie de cuartos de final ante La Máquina en el estadio Azteca, pero al margen de eso, Da Silva se proyectó más allá y externó al Diario de los Deportistas su anhelo de ser campeón como jugador azulcrema, aunque no negó que recibir la vuelta en el Coloso de Santa Úrsula sería un marco inmejorable.

“Me gustaría salir campeón, si se cierra en casa, perfecto, sería el mejor escenario. El chiste es levantar la copa, es la mentalidad y las ganas que tengo, es algo que no me sale de la cabeza y algo por lo que voy junto con mis compañeros”, confesó.

LENTA RECUPERACIÓN

Mes y medio fue lo que William tuvo que esperar para volver a jugar. Una tendinitis sufrida en el juego contra León propició que quedara fuera y se perdiera la segunda mitad del torneo regular y un par de encuentros de Copa MX.

Con la lesión superada, Da Silva reconoció que la rehabilitación tardó más de lo pensado, pero destacó la fortaleza mental con la que se encuentra, misma que, dijo, lo llevará a superar cualquier carencia física o de ritmo de juego con la que haya regresado.

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“Tardó un poco más de lo que esperábamos. Eso hace que uno pierda un poco en la parte física. Eso me ha costado mucho trabajo, pero mentalmente estoy muy bien, al 100 por ciento; sé muy bien lo que quiero y le voy a poner todas las ganas posibles para que el tiempo que perdí y el ritmo no me venga a tapar el sueño que tengo. He trabajado muchísimo, y junto con mis compañeros, podemos salir adelante”, culminó.

EL NÚMERO

8 partidos se perdió William da Silva entre Liga y Copa durante el periodo que estuvo lesionado. Fueron en total siete semanas y media las que el mediocampista estuvo sin jugar.