El encuentro, no exento de polémica, cayó del lado del conjunto inglés gracias, en parte, a dos polémicos y discutidos penaltis, transformados por Hazard (m.21) y Fabregas (m.73), y a la rigurosa expulsión en los compases iniciales del defensa y capitán local Sadygov.

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Los ‘Blues’, que han llegado a la ronda de octavos en 13 de sus últimas 14 participaciones en la máxima competición continental, sabían que un triunfo en Bakú les garantizaba un puesto en la siguiente ronda, y para ello el técnico Antonio Conte no se relajó y salió de inicio con muchos de sus titulares habituales.

El Chelsea con estos tres puntos se coloca momentáneamente líder del grupo a falta del partido entre el Atlético de Madrid y la Roma en el Wanda Metropolitano.