Pedro Caixinha aceitará a La Máquina con trabajo de playa en la segunda fase de pretemporada. En medio de sonrisas y la calidez de sus aficionados, el cuadro celeste partió a Manzanillo, Colima, sitio donde permanecerán cinco días para encaminar su marcha rumbo al Clausura 2018.

Hasta en los momentos de pausa y serenidad, el Cruz Azul es capaz de agitar a sus aficionados, justo cuando su camión arribó a la entrada de la terminal uno del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, la ola de seguidores celestes cobijó a su equipo, lo acompañó hasta la puerta de abordar y lo despidió con las sonrisas que desnudan la ilusión.

En ese recorrido, la lente del ESTO atrapó a los jugadores celestes, dirigidos por el entrenador europeo, ayer se dio tiempo para consentir a todas las personas que solicitaron un vídeo, una postal o un autógrafo. Después, Caixinha aprovechó para saludar al Diario de los Deportistas, él irradia seguridad en cada paso. El timonel de los celestes se robó los reflectores, pues fue rodeado por la fanaticada y sus jugadores.

Antes de realizar el trámite de documentación, Gerardo Flores, Santiago Giménez, Jordan Silva, Julián Velázquez, Ángel Mena y Francisco Silva charlaron, bromearon y compartieron diversas anécdotas del día. Repartieron fotografías al pueblo celeste que los acompañó previo a emprender el viaje.

Del otro lado de la terminal área, Jesús Corona se detuvo a dar declaraciones con la prensa que aguardó su llegada, en sus palabras se esparció la nostalgia, cuando le mandó un mensaje de buenos deseos a Christian Giménez en su nueva aventura futbolística.

El Cruz Azul entrenará cinco días en las playas de Manzanillo, en aras de reforzar el trabajo físico que servirá como base para el siguiente certamen. El viernes regresarán a la capital mexicana para encarar sus tres duelos amistosos restantes de cara al Clausura 2018.