Cancún.- Una consecuencia lógica del éxito que Matías Almeyda ha tenido en Guadalajara es el hecho de recibir propuestas de otros clubes frecuentemente. Sin embargo, ninguna de estas tienta al pastor del Rebaño, quien con sinceridad, confesó al Diario de los Deportistas que es feliz en la Perla de Occidente, valora ser el técnico de Chivas al grado de lamentar que en su natal Argentina no se le dé el valor que cree que merece el futbol mexicano.

“Estoy feliz y por eso estoy. El día que no esté feliz, me voy o me echan antes. Le doy un valor muy grande a ser el técnico de Chivas. Cuando voy a Argentina, el futbol mexicano no se transmite y digo que es una lástima porque muchos clubes de Sudamérica viven gracias al futbol mexicano”, comentó y agregó que “no se sabe la cantidad de hinchas que tiene Chivas, se minimiza y Guadalajara es muy grande, es el primer o segundo lugar de conjuntos con más aficionados en el mundo y es muy grande eso, demasiado grande, pero mucha gente acá no se da cuenta de lo grande que es. Chivas es el más grande y popular, pero no solamente en México, es el más popular casi en el mundo”.

El privilegio que Almeyda siente es tanto que se considera a él mismo como un “iluminado” por poder estar con los rojiblancos, cosa que lo llena no solamente en lo profesional, ya que a nivel humano también confesó que hoy tiene plenitud.

“Soy una especie de iluminado al estar acá y conocer la cultura mexicana, criar a mis hijas en México. No solamente le doy el valor deportivo y de trabajo, le doy un valor de vida porque voy creciendo como ser humano aparte de entrenador”, reveló.

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Los rumores que lo colocan cerca de otras instituciones no inquietan a Matías, y aunque suele escuchar las ofertas, siempre las comparte con la directiva de Guadalajara, pero con la prioridad de respetar su contrato en México y siempre con la mente puesta en el día a día y no más.

“Yo escucho que hablan. He tenido suerte de tener propuestas, digo que es suerte porque digo que es bueno que alguien se detenga a ver y le guste tu trabajo. He escuchado muchas ofertas por respeto y siempre se las cuento a la dirigencia por respeto, pero yo tengo un contrato acá y no pienso en otra cosa, pienso en preparar el entrenamiento del día, pensaré en el 26 de diciembre cuando regresemos a las prácticas, no veo mucho más allá. En la vida, que va reflejada a mi trabajo, el futuro es incierto. No puedes programar porque no sabes que va a pasar. Veo con pie firme el presente”, explicó.

CONVENCIMIENTO DEL PLANTEL

Todos estos valores y arraigo que el “Pelado” ha adquirido en los años que ha dirigido a Chivas trata de transmitirlo a sus jugadores, de los cuales reconoció que han sabido recibir el mensaje y aplicarlo dentro de la cancha para defender su trabajo, el de sus compañeros y el del cuerpo técnico.

“Creo que ellos (los jugadores) han entendido el mensaje de matarse dentro de la cancha, de jugar por su compañero porque hemos tocado muchos temas humanos. Cada uno le cuida el plato de comida a su hijo y al hijo de su compañero, pero a la vez Chivas para mí representa a México por el hecho de ser puros mexicanos, tiene un lado social bastante importante. Cada jugador de Guadalajara lucha por él y por el mexicano que juega en otro club y está tapado por un extranjero”, remató.