EL viacrucis parece no llegar a su fin. La lesión que alejó a Amaranto Perea de la Copa del Mundo parece apartarlo del Mundial de Clubes. A cinco meses de la cirugía en la rodilla derecha, no ha sanado al cien por ciento y es por eso que el jugador de Cruz Azul reconoció que atraviesa el peor momento de su carrera.
“No hay novedad. Esta sería la sexta semana de rehabilitación y tendremos una resonancia el fin de semana y ahí sabremos qué tanto se desinflamó el hueso. Los tiempos eran para que estuviera ya haciendo trabajos de campo. Sí, es el peor momento de mi carrera porque no he jugado. No supe reaccionar a una lesión tan larga, es una experiencia negativa y de lo malo sacas lo positivo”, expresó el zaguero.
Eso sí, Perea dejó en claro que todos los involucrados en su rehabilitación son culpables de que se alargará su lesión, incluso él, debido a que se apresuró: “Todos los que estamos incluidos en esto hicimos algo mal; me refiero a apresurar la vuelta. Vimos que podríamos arriesgar cosas pensando en que a rodilla mejoraría y ahí se perdió un mes”, explicó.
“Hace tres semanas en una resonancia se veía un hueso al 70 por ciento desinflamado, eso es positivo y esperemos que se haya ido completamente. No volveré a tomar riesgos, lo haré cuando esté plenamente bien esto me sirve para cumplir los plazos”, puntualizó.

DESPREOCUPADO
Es casi un hecho que el colombiano no estará en la justa internacional, situación que no le preocupa, ya que en lo único que se enfoca en su recuperación. “No tengo tiempo para pensar en eso, sólo pienso en recobrarme de la lesión. Aprendí a ser paciente ya que a veces las prisas atraen contratiempos”, indicó, desesperado por tanta inactividad.
“Lo preocupante es la nula competencia que he tenido, estoy en una clara desventaja con mis compañeros. Físicamente estaré perfecto, el tema es el ritmo de competencia, pero cuando esté listo buscaré lo que quiero”.