Con la tecnología de Google Traductor

Mira

17, enero 2018 - 13:59

┃ Miguel Angel García

Diego Silveti

 

 

Por muy duro que la vida golpee, detenerse no compone nada. Los ejemplos del toreo bastan. Existen grandes hombres que son indelebles hasta el fin de los días; procrean hijos de espíritu igual, inquebrantable, de admirable entereza que pese a los naufragios en el navegar de sus existencia, jamás se hunden ni claudican. Dijo Belmonte: Se torea como se es.

Hijo del Rey David, nieto de don Juan Silveti Reynoso y bisnieto del grandioso “Meco”, Diego trae en sus venas no solamente la sangre del toreo, también ese brío que le hace especial, persistente, inmutable y estoico como individuo, que patenta el dicho de Belmonte en los ruedos.

El 12 de noviembre de 2003, su padre David Silveti dejó el mundo terrenal para convertirse en leyenda. El 24 de diciembre de 2017, su abuelo, don Juan, se reunió con David; ambos partieron de Salamanca, aquella tierra que ha visto echar raíces una de las dinastías más importantes del mundo taurino. El padre y el confidente, Diego ha despedido a dos personas que han sido su todo, como lo es ahora su tío Alejandro Silveti.

Diego visitó ESTO, saludó a nuestro director y gran taurino, Salvador Aguilera, con quien charló amenamente sobre varios temas; el recién fallecimiento de su abuelo, así como de su inminente presentación en La Plaza México y los planes a futuro.

A FLOR DE PIEL

-¿Se vale hacer una pausa y recapitular tu vida?

“Indiscutiblemente mi padre y mi abuelo han sido dos pilares fundamentales en mi vida, marcaron lo que soy y lo que quiero ser. Desde luego no ha sido sencillo: primero se fue mi papá cuando yo era muy joven; ocupó su lugar mi abuelo y con él viví muchas cosas íntimas, fue mi confidente, mi maestro y mi amigo. La pérdida de mi abuelo fue muy dura, aunque se presentía, uno jamás está preparado para este tipo de cosas. Pero cuando eres creyente y tienes fe, entiendes que después de esta vida hay una mejor para gente que dejó un legado tan grande; ahora tengo allá arriba no uno sino a dos ángeles y siempre me han de estar iluminando”.

-¿Con qué te quedas de ambos?

“Sobre todo en lo personal: mi papá me dejó la educación y el ejemplo de cómo trascendió. Mi abuelo de igual forma, su legado, su amistad y el cariño que supo ofrecer”.

-De qué están hechos los toreros para superar este tipo de adversidades?

“En la vida van a pasar distintas tragedias. Sí creo que el toreo tiene algo bonito que te enseña a jugarte la vida, que las cosas se deben superar y que el ser humano es capaz de superarse así mismo. En el toreo te das cuenta que las cosas son de verdad”.

-El sentimiento está a flor de piel, el lunes te abandonaste ante tu segundo toro en Moroleón y estarán esperando pisar La México para explotar todo este cúmulo de sensaciones.

“Desde luego. Se han venido así las circunstancias y como dices, espero sacar lo que estoy viviendo y espero que en la Plaza México lo pueda ver”.

TEMPORADA GRANDE

“Esta será mi presentación en la Temporada Grande, a diferencia de otros años que pisábamos el coso hasta tres tardes; este ciclo cambiamos el esquema y es mejor, ya que en este momento le viene bien a mi carrera no estar presente tantas veces. Por supuesto que optamos por la categoría y la calidad, como este compromiso que nos causa mucha alegría”, señaló Diego al director.

-¿Qué busca un torero al llegar a la Plaza México, cambia la expectación al llegar a este coso?

“En realidad no debería de ser así, ya que todas las plazas merecen el mismo respeto, hay que salirse a jugar la vida ante dos toros que también merecen el mismo respeto. Sin embargo, conocemos lo que es La México, que da y quita y que te puede catapultar o sepultar, como dijiste. Esta plaza marca el devenir de lo que será la temporada. Desde luego cuando tienes más experiencia y mayor madurez se asume de otra forma el compromiso; es curioso, pues cuando comienzas piensas en la incertidumbre y te ataca más el miedo, y crees que conforme avance el tiempo será más fácil afrontar el compromiso, pero pasa lo contrario, pues te das cuenta de la responsabilidad y lo que implica pisar este coso”.

-Pero también has probado la miel en este coso.

“Si, claro. He tenido la oportunidad de triunfar en La México, he cortado un rabo y salir a hombros varias veces, me han tocado cornadas y reconocer tardes complicadas. Lo que se intenta ahora con esta madurez es disfrutar y que todo surja con naturalidad, pues lo contrario la gente lo percibe. Ahora lo que la gente quiere ver ya no es al triunfador de antes, el que gustó y sorprendió. Lo que quieren ver es a un torero con más pozo, hondura y serenidad y que así enfrentarás las cosas”

-Hablas de una madurez, ésta que se va dando cuando pisas este tipo de plazas y sabes que la exigencia es otra y que el público de La México está esperando con expectación que hagas tu mejor faena.

“Si, por supuesto. No hemos dejado de torear, hemos estado en Europa y el interior de la República y en La México, esto desde luego te hace aprender y evolucionar; pero luego también llegan tardes complicadas donde te das cuenta de la exigencia; en ese momento es bueno interiorizar para saber quién quieres ser una vez que ya cumpliste ciertas metas. ¿Ahora qué quiero ser? Ya no es cortar las orejas por cortarlas, quiero dejar una huella y eso se llama madurez. Pienso que estoy en ese momento, se nota, fluye, pues noto que las personas perciben mi toreo de otra manera, eso me tiene contento por que estoy dejando capacidad y avance en mi carrera”.

APELLIDO

-Cuando sigue apareciendo el apellido Silveti en un cartel, de entrada ya hay presión, ¿estas de acuerdo?

“Siempre he sido consciente de lo que representa el apellido, es lo que me tocó vivir y lo asumo naturalmente; no te sé decir que sienten otras personas que carguen otros apellidos. Gracias a Dios nací en esta familia y lo que más puede aprender a mis antepasados y antecesores es que hay que llevarlos con la máxima serenidad y responsabilidad posible. Pero también es mi vida, tengo que forjar mi camino y que el toro no sabe si me apellido Silveti, López o Pérez y ahí lo único que me llevará adelante serán mis ganas y preparación para querer ser en la vida. Pero tampoco soy monedita de oro y es natural que no soy del agrado para algunas personas, hay que tomar lo bueno de las críticas, cuando eres figura pública siempre se está en el ojo del huracán y el primer crítico siempre debe ser uno mismo. Ante el toro no puedes ser deshonesto”.

EUROPA

-Habrá campaña en España para este año?

“Si Dios quiere, esa es la intención. Lo primero es poder triunfar este domingo y continuar con esta racha que llevamos –cuatro salidas a hombros consecutivas- e ir a España en condiciones que veamos convenientes; hemos toreado siete años consecutivos en la Iberia, sobre todo en Madrid y la gente allá ya nos identifica. Para regresar hay que ir con una temporada bonita y que valga la pena. Ojalá y este domingo llegue un triunfo fuerte para adueñarme de la temporada y causar ese impacto para después pensar en otras cosas”.

-¿Qué opinas de los toreros mexicanos en el plano internacional?

“Llevamos muchos años en que los toreros jóvenes nos hemos ido hacer a España y allá nos hemos enfrentado a adversidades y competencia fuerte y hemos puesto el nombre de México en lo alto. Nos identifican como toreros importantes y eso es bonito. A México también llegan las figuras mundiales y nosotros estamos para defender lo nuestro, el sitio y nuestra tierra. Tenemos para dar guerra a los más gallos, como el domingo en La Plaza México”, concluyó el torero de dinastía, quien se despidió con un fuerte apretón de manos, agradecido con las atenciones en la bien llamada, Casa de los Toreros.