Estuvo cerca, pero no pudo ser. Luego de la derrota de los Patriotas de Nueva Inglaterra ante las Águilas de Filadelfia, Tom Brady no pudo convertirse en el jugador más ganador de la historia,  por lo que tendrá que compartir, al menos por un año más, el trono con el emblemático Charles Haley, con cinco trofeos Vince Lombardi cada uno.

Tom Brady llegó a este Super Bowl con la posibilidad de ganar su sexto anillo, situación que lo hubiera encumbrado como el máximo triunfador en la historia de la NFL. A lo largo de su carrera, la cual comenzó en el 2001, Brady ha disputado ocho Super Bowls, ha ganado cinco y ha perdido tres, dos ante los Gigantes y este último, ante las Águilas.

Ya el Super Tazón pasado Brady se convirtió en el quarterback más ganador en la historia, marca importante si se toma en cuenta que superó a jugadores emblemáticos como Terry Bradshaw y Joe Montana, a quien muchos consideran, o consideraban el mejor jugador de la historia, hasta que apareció Brady, sin embargo, la mira estaba puesta en una nueva corona.