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Rafael Márquez analizó el juego en el que su equipo Hellas Verona visitará al Inter de Milán, en duelo de la fecha 11 de la Serie A, e hizo un balance de su estancia en el cuadro “mastín”, donde ya es referente.

“Siempre es bueno tratar de hacer un gran partido contra los grandes. Tuvimos una gran presentación ante Lazio que venía de cuatro victorias consecutivas y ésta es otra gran oportunidad para lograr una buena presentación el próximo domingo” declaró el michoacano.

En rueda de prensa, el ex jugador del Barcelona anticipó que tratarán de romper la racha del cuadro “gialloblu”, que nunca ha podido ganar en el estadio Giuseppe Meazza: “Es una grandiosa oportunidad para lograrlo y esperamos regresar a Verona con los tres puntos”.

“Debemos convencernos de nuestra calidad, es una competencia muy difícil y contra cualquier equipo puedes ganar o perder. Tenemos que luchar por mantenernos lo más arriba posible”, dijo.

El central “azteca” evaluó a sus siguientes rivales, y aunque no están en su mejor momento, eso no les resta peligrosidad e identificó a sus elementos que más le preocupan, ambos argentinos.

“(Rodrigo) Palacio e (Mauro) Icardi son muy fuertes y debemos estar lo más compactos posible, no dejar espacios entre nosotros, ser una sola escuadra adelante y atrás, eso es lo más importante”, añadió.

Márquez respaldó sus esperanzas de conseguir un buen resultado con elogios a sus compañeros, que pese a la dificultad del torneo italiano, aspiran a más metas, más allá de la salvación que, desde que llegó, tiene claro que es el objetivo principal.

“Encontré una liga muy dura porque todos los equipos son muy fuertes, pero creo que también nosotros somos una escuadra competitiva. Encontré un grupo muy unido, creo que podemos hacer un poco más de lo que hemos hecho hasta ahora”, valoró.

Desde su llegada, el jugador de 35 años ha ocupado un puesto fundamental dentro del once titular, gracias a su experiencia pero también al hecho de que encajó rápido con los planes del club, incluso su labor le valió ser capitán ante Cesena.

“Para mí ha sido muy fácil la adaptación, creo que me he acoplado de inmediato al sistema, la confianza con la escuadra ha sido muy buena. Tenemos la fortuna de ser un conjunto que piensa en lo mismo”, apreció.

Asimismo destacó que “Fue un honor ser el capitán del equipo, pero es sólo una cosa simbólica, hago mi trabajo con o sin el gafete de capitán, pienso que para todo el equipo soy un jugador importante y por eso debo trabajar más que ellos, para poder ser un ejemplo”.

Por último, se dio tiempo para hablar sobre el pampero Javier Saviola, su compañero en su etapa “culé” y que ahora en el Verona ha tenido muy poca acción con los “mastini”.

“Lo conozco desde hace mucho tiempo, está tranquilo, es un gran profesionista, trabaja con una buena actitud siempre, aunque no juegue mucho. Está contento aquí, encontró un grupo con muchos sudamericanos y nunca ha dicho algo sobre estar inconforme o querer salir”, confesó.