El sonorense Óscar Valdez (23-0, 19 anestesiados) puso punto final a la etapa fuerte de su preparación que realizó en Guadalajara de cara a su cuarta defensa del título pluma de la Organización Mundial de Boxeo que realizará el próximo 10 de marzo ante el retador británico Scott Quigg (34-1-2, 25 antes del límite), en el StubHub Center en Carson, California, cartelera que organizará Top Rank.

El campeón mundial mexicano cerró su concentración en la Perla de Occidente mostrando gran velocidad de manos y piernas durante el trabajo de manoplas que realizó junto a su  entrenador Manny Robles.

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“Cerramos la preparación aquí en Guadalajara. Nos despedimos satisfechos por los resultados. Nos vemos el próximo 10 de marzo en Carson”, escribió en su cuenta de Twitter, el nacido en Nogales, Sonora.

El doble peleador olímpico admitió que la pelea que le espera es, hasta ahora, la más importante y difícil de su carrera por el grado de dificultad que representa enfrentar a Quigg, un adversario de gran experiencia que ya fue campeón del mundo en peso supergallo.

“La pelea ante Quigg es la más importante de mi carrera, es un boxeador de alto calibre, de renombre, esta pelea la habíamos estado pidiendo y por eso la tomamos con seriedad, para seguir demostrando a donde quiero ir”, externó el monarca en las 126 libras de la WBO, quien inició su preparación en tierra tapatía el pasado 6 de enero, por lo que trabajó poco más de seis semanas en el gimnasio de Rafa Espinoza, a quien le agradeció las facilidades para montar su campamento junto a su equipo de trabajo.

En estos días previos al combate se dedicará a moverse y a realizar ejercicios de soltura para mantenerse dentro del peso y en ritmo en lo que será su estreno como campeón del mundo en este año.