El contrato por cinco años y 110 millones de dólares que el cañonero de origen cubano, J.D. Martínez, acordó con los Medias Rojas de Boston hace una semana fue firmado ayer, en la conferencia de prensa alusiva a su esperada presentación en el JetBlue Park.

Después de conectar 45 jonrones en 119 partidos combinados la temporada pasada con los Tigres de Detroit y los Diamantes de Arizona, Martínez llegó a la agencia libre como el jugador de posición más cotizado y fue constantemente vinculado con los Medias Rojas durante el receso de invierno.

“Adoro este juego. Me encanta jugar, y es emocionante hacerlo ante aficionados que sean igual de apasionados y les guste tanto el beisbol”, expresó Martínez durante su presentación oficial con el equipo que dirige el timonel Alex Cora.

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Los Medias Rojas se tomaron su tiempo respecto a la evaluación médica, prestando atención sobre todo a una lesión de pie derecho que Martínez sufrió el año pasado. Eso llevó a ciertos cambios de discurso sobre proteger a los Medias Rojas por encima del cumplimiento del acuerdo, e incluso el jugador de 30 años viajó de nuevo a Boston en cierto momento la semana pasada para someterse a una evaluación más. Sin embargo, fue considerado plenamente sano para 2018.

Boston confía que Martínez ayude a un repunte en esos números. El slugging de .407 de Boston les dejó en el 26to puesto en las Mayores, solo por encima de los Angelinos de Los Ángeles en la Liga Americana.

En 119 juegos la pasada temporada, Martínez bateó para .303 con 104 carreras impulsadas. Sus 45 jonrones fueron la tercera máxima cantidad en las mayores, además de acumular un porcentaje de slugging de .690. Sería el tercero o cuarto al bate en la alineación del nuevo manager Alex Cora.

“Confío en mi talento. Sé lo que soy capaz de hacer y lo que pongo sobre la mesa, y eso me ayudó a tranquilizarme un poco más”, estableció Martínez para después encaminarse a su primera práctica con el equipo.