POR VIOLETA ALVA

Aunque los números benefician al América en esta edición del Clásico Nacional, Chivas podría ganarle a las Águilas en cuanto a psicología se refiere.

El decir que en este tipo de encuentros no importa la posición en la tabla en la que se llegue y que son partidos que se juegan a parte es un argumento muy utilizado por los futbolistas que tiene una base científica.

“Los Clásicos son partidos aparte; si bien son los mismos jugadores y son los mismos entrenadores, pero los Clásicos tienen esta connotación que justamente es emocional. Imagínate que si uno puede jugar con la misma cabeza que va a jugar un Clásico, siempre metido, siempre concentrado, siempre llegando a la última pelota como si fuera la última; de eso se trata el trabajo de la psicología deportiva y los clásicos tienen una connotación aparte. En Argentina decimos no importa cómo se llegue”, explicó al Diario de los Deportistas el psicólogo deportivo Pablo Sucarrat.

El especialista explicó que estos encuentros marcan un punto y aparte, y podrían cambiar el futuro de los equipos.

“Los Clásicos sí tienen una connotación psicológica a parte, esto es así y es verdad”, dijo tajante. “Son como encuentros bisagra, que les llamamos, dónde en algún momento hay muchas expectativas, hay mucha adrenalina, hay mucho de lo psicológico que fluye tanto para bien como para mal”, explicó.

El psicólogo deportivo, con gran experiencia en el futbol europeo y argentino, contó lo que vivió hace unos años cuando trabajó para el conjunto de Rosario Central, que recién ascendido, le quitó el invicto al Newell´s Old Boys y logró una supremacía de tres temporadas.

“Cuando recién había comenzado se jugaba un clásico contra el Newell´s Old Boys, que venía de ser campeón, venía de 12 juegos invicto. El plantel venía adaptándose a la categoría, y lo ganamos; no sólo eso, los tres partidos posteriores los volvimos a ganar. Y de ahí, Newell´s, que perdió, después le costó muchísimo volver a ganar, estuvo mucho tiempo sin ganar”, recordó Sucarrat sobre una situación parecida a la que viven hoy en México Chivas, penúltimo de la tabla general, y América, líder invicto.