Con la Copa del Mundo Rusia 2018 a menos de 100 días, el entrenador de la selección mexicana, Juan Carlos Osorio, visitó el continente europeo.

Con el objetivo de estructurar su plantilla de jugadores que representaran al país en la contienda mundialista, Osorio platicó con el elemento del PSV Eindhoven, Hirving “Chuky” Lozano.

En entrevista con el diario “Marca Claro”, el colombiano señaló que el delantero mexicano pasa por buen momento en el club holandés, así como de su calidad futbolística y su importancia en el proceso de la selección.

“Al principio de nuestra gestión, Hirving destacaba por su velocidad y era influyente en la estrategia y en el propio juego porque obligaba a defender mucho más atrás. Le ha sumado a su juego los controles orientados y su finalización con lo que no solo afecta el juego, sino el resultado. Para el PSV y la selección ha anotado goles muy importantes y podemos decir que es un futbolista más completo y que está alcanzando el potencial que siempre le vimos para triunfar en Europa”, relató en la entrevista.

Mencionó el aumento que ha tenido México al exportar elementos al futbol de Europa, y de nuevos casos que se dan en el país, tal como Omar Govea, joven que se encuentra jugando en primera división en Bélgica, en el Royal Excel.

“Es otra manera y no es extraña para otras naciones que lo hacen con más frecuencia. ¿Por qué no podría ser México? Hay factores que complican ese camino, pero lo más importante es saber que el mexicano tiene suficiente talento para pensar que puede jugar en Europa”,

Con la mente en el mundial, Juan Carlos evaluó su proyecto de clasificación a Rusia y se encontró con escenarios difíciles en Honduras y Trinidad y Tobago, además del propio estadio Azteca, donde según sus palabras los contrarios venían a desplegarse.

“Por temperatura, Trinidad y Tobago; por la cancha como tal y el escenario, Honduras; en nivel futbolístico, todos los juegos en el Azteca fueron muy difíciles porque todos los rivales vienen a replegarse y a tratar de jugar en transiciones de defensa-ataque y hay equipos muy preparados para esa idea de juego. Yo creo que lo supimos controlar pero hubo algunos juegos donde fue más marcada la dificultad que en otros”, compartió.

Con su futuro en la selección nacional, dejó ver que está a gusto con el proyecto y le gustaría continuar de ser posible, pero ha significado el reto más grande de su carrera.

“No y una de las razones fundamentales es la gran diferencia entre seleccionador y entrenador. El entrenador define estratégicamente cuál es el plan, lo liga a una estructura de juego y selecciona al mejor futbolista para ese juego en particular. Por el contrario, un entrenador entrena el día a día, comportamientos. Por mi formación y por cómo ha sido mi carrera, entiendo las obligaciones de un seleccionador y el dirigir a la selección mexicana ha sido el reto más grande. Creo que he evolucionado en esos aspectos”, puntualizó.