POR HÉCTOR REYES

FOTOS: MARTÍN MONTIEL

Víctor Manuel Estrada Garibay se convirtió en el primer medallista olímpico mexicano en recibir un Doctorado Honoris Causa, investido por el Tecnológico de Estudios Superiores de Cuautitlán Izcalli, en compañía de sus familiares y amigos que aplaudieron al actual presidente de ese municipio.

El director de la institución educativa Francisco Medrano Ruvalcaba fue la persona que le entregó la medalla dorada, el birrete con borlas, el diploma de honor y el libro abierto de la sabiduría en el clímax de la reunión para que Víctor pudiera incorporarse a su claustro.

Dentro del extenso currículum deportivo destacaron que el especialista en taekwondo ganó la primera medalla olímpica para México en este deporte en el año 2000, la plata del Campeonato Mundial celebrado en Nueva York, ganador de cuatro Copas del Mundo y tres años invicto que lo instalaron como número uno del mundo en su categoría.

El doctorado no es un título académico sino le fue entregado por su buena reputación y trascendencia, un alto honor que le fue conferido a través de un jurado que deliberó para entregarle tan importante nombramiento.

Víctor a lo largo de su discurso agradeció a todas las personas que lo han rodeado a lo largo de 14 años dentro de la administración pública, de sus amigos diputados Ulises Ramírez y Jacobo David Checa; el representante del gobierno del Estado de México Cuitláhuac Anda que alabó el trabajo que ha realizado el deportista olímpico que terminará su gestión en Cuautitlán Izcalli, el 31 de diciembre, entre otros representantes de la comunidad de esa demarcación.

“Lo que me da más orgullo es haber pasado de lo deportivo a una nueva etapa en mi vida que es la parte profesional, en la parte administrativa pública y política, cuando en muchas ocasiones es un paso muy difícil de dar, es un gran reconocimiento en mí vida y estoy muy orgulloso”, expuso Víctor.

Manifestó que gran parte de su éxito se lo debe a su esposa América Rangel, quien fuera también atleta de primera fuerza, a sus padres, suegros, hermanos  y especialmente a sus dos hijas: Natalia y Victoria – sus dos “verdaderas medallas” de su vida -, al reconocer que adoptó una profesión nada sencilla como es la política.

“Mi vida ha sido de retos, de obstáculos, de paredes muy altas donde parecían inalcanzables, entonces esto es otro reto de otras magnitudes, mucho más complicadas, gobernar es muy difícil, pero yo estoy convencido de que quiero a mi país y estoy convencido que con valores y con principios se pueden cambiar las cosas”, citó Estrada Garibay.

ORGULLOSO PADRE

“Ha sido un trabajo arduo, muy profesional, muy dedicado, hoy buscando el bienestar de la población, en realidad de los políticos que podemos decir están haciendo las cosas bien”, comentó el médico Luis Manuel Estrada Guerrero, papá de Víctor.

La ceremonia tuvo como invitados especiales relacionados con el deporte al ex director de la CONADE Nelson Vargas, a la montañista Karla Wheelock y a su entrenador Oscar Aguilar, quien ha sentido una satisfacción el ver el desarrollo de su pupilo desde que era un niño.