Por Omar Rodríguez

Puebla.-La salvación todavía depende de La Manada pero ésta solamente se concretará si los dirigidos por Rafael Puente consiguen siete unidades en la recta final del torneo.

La cuota no parece complicada de alcanzar pero lo cierto es que Lobos BUAP es uno de los peores conjuntos del torneo, acostumbrado a caer tanto en casa como fuera de ésta y por lo general con una buena cantidad de goles en contra.

Así que si el equipo poblano pretende dar un paso firme rumbo a la permanencia en la Liga MX deberá derrotar sí o sí a los Diablos del Toluca, quienes el próximo sábado tratarán de convertir el estadio Universitario en un infierno.

El portero Lucero Álvarez reconoció la peligrosidad del equipo escarlata, sin embargo, dijo confiar en que La Manada podrá mojar la pólvora de un rival que se perfila como serio candidato a ingresar a la liguilla.

“Es un partido muy difícil porque viene Toluca, que es un rival muy duro. Tuvimos algunos días para preparar correctamente este partido y buscar los tres puntos que nos acerquen a nuestro objetivo. Nuestro equipo sabe a qué juega y lo vamos a seguir demostrando partido a partido porque Lobos lo necesita y tiene que estar en primera”.

Lobos BUAP mantendrá su sello ofensivo, sin embargo, tiene la obligación de ser cuidadoso en extremo con la artillería de los Diablos porque una serie de desatenciones podrían castigarle con otra derrota en casa.

“Hay que ser conscientes que tienen un muy buen equipo y que por algo están en las primeras posiciones pero nosotros tenemos que ser muy inteligentes para tratar de esperar y contragolpear para obtener los tres puntos”.